Lily Kryzhanivsky, una niña de 9 años, disfrutaba de una acampada cerca de Fruitland, en Washington. Fue el pasado sábado 28 de mayo cuando, al introducir en un sendero con dos amigos, fue atacada por un puma. Sus acompañantes salieron huyendo para pedir ayuda y cuando regresaron con los adultos, encontraron a la menor cubierta de sangre. Dieron caza al animal y lo mataron.
Rápidamente fue trasladada de inmediato en avión a un hospital. Ahora, se está recuperando después de una cirugía por múltiples heridas en la cabeza y la parte superior del cuerpo.
Su tío ha pedido fondo por redes sociales sobre todo para costear los gastos de salud y ha publicado fotografías de la niña en el hospital aún con las heridas y con las señales de las cirugías y los puntos.
Sólo 20 personas han sido atacadas por pumas
Desde 1924 solamente 20 personas han sido atacadas por pumas en esa región montañosa y dos han muerto, señala la agencia de conservación de la naturaleza del estado de Washington.
Una de las portavoces de la agencia declaró a un canal de televisión local que están investigando las circunstancias del ataque y que se analizando el cuerpo del animal con el objetivo de detectar posibles enfermedades.
¿Qué hacer ante el encuentro con un puma?
"En este caso, esta niña no hizo nada mal", ha señalado Staci Lehman, portavoz del Servicio de Pesca y Vida Silvestre. "Ocurrió muy rápido, y no hay nada que pudiese haber hecho para evitarlo", ha añadido.
La institución ha aprovechado para dar consejos en caso de que esto vuelva a suceder y alguien se encuentre con un puma. Nunca se debe dar la vuelta y echar a correr, pues esto podría propiciar una respuesta de persecución por parte del animal. Así, recomienda lo siguiente: