Una niña de 4 años murió el pasado 13 de junio después de que la olvidaran en el autobús del colegio durante siete horas en un día de intenso calor en la localidad húngara de Tomajmonostora. La menor permaneció en el vehículo desde las 08:30 horas de la mañana del 13 de junio hasta las 15:00 horas.
Según la información que ha trascendido a los medios, Flora Inez fue recogida de su casa por el autobús para llevarla a la guardería, pero el conductor supuestamente la dejó en el autobús olvidada. El resto de niños se bajaron al llegar a la escuela, se cerraron las puertas y nadie verificó si quedaba alguien en el interior. Tampoco nadie escuchó sus llamadas de auxilio cuando la temperatura subió a 50ºC en el vehículo.
No pudieron salvar su vida
Flora se encontraba inconsciente pero todavía viva cuando finalmente la encontraron. El Servicio Nacional de Ambulancias de Hungría dijo: "Los médicos transportaron en helicóptero a una niña de cuatro años en una condición potencialmente mortal al hospital". La niña, que sufrió un golpe de calor, fue trasladada de urgencia a la Unidad de Cuidados Intensivos y luchó por su vida durante tres días antes de fallecer.
"Lo más probable es que su cuerpo se calentó tanto que se secó porque sudó y exhaló toda el agua de su cuerpo", señaló la pediatra Orsolya Ács al medio húngaro Bors. "Ella no pudo corregir la temperatura corporal elevada, aunque el cuerpo siempre trata de enfriarse al principio en casos similares".
Según señalan los informes, el conductor del autobús, que ha sido identificado como Itsvan T, de 56 años, sufrió una crisis nerviosa y ahora recibe tratamiento psicológico en un centro situado en las inmediaciones de Szolnok. "Mi padre estaba muy desgastado por lo que pasó", declaró a Bors el hijo del conductor, que no ha sido identificado.