Aunque la plataforma de series y cine online Netflix ha llegado hace tan sólo dos años a España, la empresa audiovisual estadounidense que ha revolucionado nuestra manera de ver la televisión comenzó su andadura por a industria hace 21 años. Y el éxito mundial que obtenido no ha sido por arte de magia, sino que su fundador, Reed Hasting, ha tenido que ir poco a poco y hasta suplicar para poder alcanzar la cima.
La idea surgió un día en el que a Hasting le daba pereza devolver la película 'Apolo 13' al videoclub, ese establecimiento en el que podíamos alquilar miles de títulos y que precisamente ha desaparecido por la irrupción de empresas como la suya. Dice la leyenda que Hasting perdió la cinta y tuvo que pagar una multa de 40 dólares, algo que le dio tal vergüenza que pensó en una fórmula para entregar cintas tarde y no pasar un mal rato.
Su primera idea consistía en una empresa que enviase a domicilio VHS o DVD's. "Entonces empecé a investigar la idea de crear un negocio de alquiler de películas por correo. No sabía nada sobre el DVD hasta que un amigo me dijo que era una tecnología nueva". Así que decidió probar en qué consistía aquello: "Corrí a un Tower Records de Santa Cruz, California, y me envié algunos CD a mí mismo: sólo el disco en un sobre. Pasaron 24 horas hasta que el correo volvió a mi casa, lo abrí y todo estaba en perfecto estado. Ese fue el mayor punto de emoción", contaba en una entrevista a la revista Fortune.
Aunque esta historia parece ser un gancho para que todo nos parezca de película, quién sabe si dentro de un tiempo él mismo produce un film o serie sobre Netflix, porque Marc Randolph, su cofundador, cuenta que se trata de "un cuento sexy" para explicar cómo funciona la empresa. Según Randolph el verdadero origen de este videoclub online tiene que ver con la fusión dos empresas para venderla a un tercero: una creada por él mismo (Atria) y otra por Hasting (Pure Software). El objetivo que tenían era hacer una especie de Amazon de lo que fuese, les daba igual, y decidieron repartir DVD's.
Dicho y hecho. El 29 de agosto de 1997 Netflix se estableció en Delaware (EEUU), pero su primer nombre no fue este sino Kibble. Comenzaron con un catálogo de 1.000 títulos y tenían como exclusividad que se podían devolver pasados una semana, en aquella época los videoclubs exigían la devolución 48 horas después. Diez años más tarde decidieron que los CDs que repartían por correo los pasarían a distribuir a través de Internet. Y fueron muy astutos porque esta fórmula fue copiada por otras marcas, pero decidieron crear productos televisivos propios que sólo podrían verse a través de su plataforma.
Contratos multimillonarios
En 2013 lanzaron su primera serie original, 'House of Cards', cuyo protagonista era reconocido en medio mundo, Kevin Spacey, aunque ahora se lamentan de haberlo tenido en plantilla por su pasado. También contaron con el director David Fisher, que produjo la serie que les catapultó a la fama como plataforma online. Sin embargo, los grandes nombres no se quedaron en su primera serie original. A partir de ese momento el responsable de los contenidos, Ted Sarandos, decidió ofrecer cantidades desorbitadas de dinero a grandes actores y directores. Su siguiente gran éxito fue contratar a las hermanas Wachowski, estas productoras, directoras y guionistas de cine pasaron a la pantalla chica de la mano de Netflix con su serie'Sense8'. El presupuesto de la primera temporada fue de 108 millones de dólares, colchón que ya quisieran tener muchas películas europeas.
Además, la plataforma se caracteriza por ofrecer contenidos para todos los públicos y no nos referimos sólo a niños, sino que han revolucionado, de nuevo, la industria introduciendo protagonistas negros, transexuales, homosexuales o bisexuales e incluso con algún trastorno de la conducta como el síndrome de Asperger. También se han atrevido a hablar de acoso escolar o de anorexia, temas que están a la orden del día en los centros educativos de todo el mundo.
Obejtivo: los Oscars
Los títulos que les han dado alegrías en estos dos últimos años han sido 'Black Mirror', 'Dark', 'Narcos' o 'Stranger Things'. Y no se olvidan de España porque aquí han producido de forma original 'Las chicas del Cable' o la película 'Fe de Etarras', además participan en 'Paquita Salas', 'La catedral del mar' o 'El Ministerio del Tiempo', entre otras.
El objetivo primordial de Netflix es obtener premios, más concretamente hacerse con algún Oscar, ya que supondría un hecho que les traería una reputaciónintachable como plataforma audiovisual online. Aunque no lo tienen nada fácil, puesto que suponen una maneaza para Hollywood. Por el momento, han conseguido varias nominaciones a estos premios, pero su documental 'Ícaro' consiguió hacerse con el Oscar en su categoría.