Por muy bonitas que nos queden, las listas de recomendaciones de series de Netflix no influyen tanto como creemos. Lo mismo pasa con los comentarios desinteresados que amigos y conocidos tienen a bien regalarnos. En muchas ocasiones es algo mucho más 'simple' lo que provoca la decisión del público: el artwork o imagen en miniatura de cada serie y película. Estas imágenes no son solo el factor influyente más importante para que se elija tal o cual contenido, sino que constituyen el 82% de la concentración del usuario durante la navegación en la web y en la app. Que acertemos (o no) depende de si antes ha habido flechazo a primera vista.
La plataforma de vídeo Netflix lleva realizando desde 2014 diversos estudios de investigación sobre sus consumidores, conscientes de que el big data ayuda a analizar gran parte de su negocio. Fue así como dieron con la fórmula del éxito: con el uso de mejores imágenes referentes al contenido, subían el número de horas de visualización y la afinidad con los espectadores.
Debemos relacionar la importancia del artwork con el hecho de que los usuarios emplean de media solo 1,8 segundos para decidir qué título ver. El impacto de los elementos visuales es tan grande que en el portal deben aprovecharlos al máximo para captar la mayor atención en el menor tiempo posible. Con el paso del tiempo la compañía estadounidense ha perfeccionado el sistema, e incluso recientemente ha revelado varias conclusiones de estas investigaciones. Por ir adelantando: estas lecciones son, como mínimo, bastante sorprendentes.
1 La eficacia de las emociones
Que los seres humanos están programados para responder a las caras es algo que se sabe desde 1º de Programas de Punset. Sin embargo, debemos puntualizar que los rostros con emociones complejas interesan mucho más que los semblantes serenos y tibios. Cuánto más amplio sea el espectro de estados de ánimo, más contenido transmitirá y mejor resultado tendrá la serie.
Probablemente esto sea debido a que las emociones complejas transmiten más y mejor información de interés a los usuarios, trasladando impresiones acerca de su tono y su contenido. Para ilustrar esto, nos muestran todas las variantes que tenían en mente para la segunda temporada de 'Unbreakable Kimmy Schmidt' y cuál fue la que tuvo más éxito (señalada con una flecha verde). No hace falta decir que nos encanta ver a Titus Andromedon compartiendo cuadro con nuestra Kimmy.
2 Historias universales, matices territoriales
La globalización está provocando que, para bien o para mal, las fronteras culturales se diluyan y los contenidos estadounidenses se disfruten en todo el mundo. Aún así siguen existiendo diferencias territoriales que deben ser tenidas en cuenta para algunos títulos y sus respectivas imágenes.
Un buen ejemplo de este caso es 'Sense8', drama de ciencia ficción creado por las hermanas Wachowski y J. Michael Straczynski, en el que actúa un Miguel Ángel Silvestre que se encuentra en Estados Unidos en busca de proyectos tan interesantes como este. Gracias a su reparto internacional y variedad de tramas, la serie posee un atractivo especial con varios ganchos para cada país. Esta diversidad se refleja en que la imagen más popular varía según el país en el que se muestre. El examen de las particularidades internacionales ayudó a Netflix a corroborar que, aunque las grandes historias trascienden las fronteras, es importante entender cómo impacta la presentación de la serie en las diferentes regiones.
3 El atractivo del lado oscuro
A lo largo de la investigación, en la plataforma de vídeo bajo demanda comprobaron que la utilización de personajes reconocibles (y sobre todo los malosos polarizados) tenía como consecuencia una mayor afinidad con los usuarios.
Los miembros de Netflix, particularmente los niños y los amantes del género de acción, responden sorprendentemente bien al artwork con villanos, por encima de los protagonistas heroicos. La serie de animación 'Dragons: Race to the Edge', spin-off de 'Cómo entrenar a tu dragón', sirve de ejemplo para este curioso caso. Las dos imágenes con los malvados antagonistas recibieron más visitas que el resto.
4 En cuanto a los actores, menos es más
Una de las primeras tendencias con las que se toparon en Netflix fue la relación inversamente proporcional entre el número de actores que aparecen en la imagen y las visitas que esta capte. Si el artwork está compuesto por tres o más personajes, el interés disminuye vertiginosamente. Es una cuestión de tamaño, porque con los anuncios gigantes en calles y carreteras ocurre lo contrario, la estrategia que se sigue es hacer alarde de un reparto numeroso.
Esta cuestión influyó directamente en las decisiones que tomaron con su buque insignia: 'Orange is the New Black'. Como vemos en las imágenes que nos facilitan, con el paso de la temporada 1 a la 2 dejaron de mostrar a todo el elenco, dejando a Piper Chapman más sola que la una.
