Lo que parecía que iba a ser una noche de celebración, casi acaba en tragedia cuando a las 2:30 de la madrugada, seis horas después de que se cerraran los centros de votación, el sospechoso entró al bar donde se encontraban Alberto Garzón, Rita Maestre, Íñigo Errejón, Mónica García y Alejandra Jacinto. El individuo entró gritando al camarero y, tras encararse con el encargado del lugar, cogió un "objeto punzante" e intentó agredir al portero. Finalmente no hubo heridos. La candidata Yolanda Díaz no se encontraba en el local.
El agresor se trataba de un individuo de 1,80 metros aproximadamente, rapado y con el cuerpo "totalmente cubierto de tatuajes", según han confirmado los testigos a GRAN MADRID. Entre estos tatuajes se encontraba uno en el cuello con un número 88, que corresponde a la octava letra del abecedario alemán, la hache, y que podría tener el significado Heil Hitler, según los términos utilizados por los extremistas.
"El tipo entró hasta la barra del fondo del local y se puso a pedir un Malibú con piña vociferando con muy malas formas", explican los testigos. Uno de los clientes, al percatarse de sus tatuajes, se dirigió a él llamándole "puto nazi". Desde Sumar afirman que el atacante llegó a blandir su arma dentro del local e intentó agredir al portero, pero la cortina de la entrada le "sirvió de parapeto".
Fue expulsado del local
Finalmente, el neonazi fue expulsado del local. Pero después de eso, él junto a sus cuatro acompañantes amenazaron a los asistentes a la fiesta. Sin embargo, después de soltar el arma, las cinco personas huyeron del lugar. La policía se presentó instantes después en el lugar y recogieron el arma.
Dio la casualidad de que, tras el suceso, donde se encontraban varias personalidades de la coalición Sumar se presentaron diputados y cargos intermediarios del PSOE, como Arnau Ramírez. Los testigos sostienen que el incidente pudo ser casual, ya que la presencia de los políticos de Sumar en el local no era una información pública. "Nos dijeron que igual podrían venir cuatro o cinco personas del PSOE, pero hemos tenido toda la noche el bar hasta arriba", afirman.
La Policía no ha localizado aún al presunto agresor, que huyó antes de que llegaran.
