Desde Galicia nos llega un impactante suceso. El pasado mes de diciembre falleció un hombre tras comer el tubérculo Oenanthe SPP (X 49 CIE 10), apodado popularmente como "el nabo del diablo". Tras su muerte se llevó a cabo una investigación para esclarecer si realmente fue el consumo de este nabo el que causó su muerte y finalmente acabaron confirmando todas las sospechas.
El juzgado de Primera Instancia e Instrucción número 2 de Betanzos envió el pasado lunes un escrito al Ayuntamiento de Bergondo para informar a los vecinos de San Paio. La víctima, de 37 años y de origen colombiano, falleció a finales de 2021 en la parroquia de Guísamo, en la localidad mencionada, después de haber ingerido este alimento.
Fue una vecina la que alertó a la policía cuando no logró contactar con el hombre. Inmediatamente, tras dictaminar que la causa de la muerte no había sido natural, se procedió a la autopsia del fallecido donde se dictaminó que la ingesta de este "nabo del diablo" había acabado con su vida. El pueblo gallego donde sucedió el suceso está consternado por lo ocurrido y ya ha sido debidamente alertado.
???? COIDADO ????
???? A toda a veciñanza do lugar de ???? Sampaio, en Guísamo:
O Xuzgado de Primeira Instancia e Instrución Número 2 de Betanzos, alertou ao Concello de que a veciñanza de Sampaio ? non inxira o ???? tubérculo OENANTHE SPP (X 49 CIE 10) xa que faleceu unha persoa ? pic.twitter.com/0jyElDO96J— Concello de Bergondo (@ConBergondo) May 9, 2022
Un tubérculo muy venenoso
Esta especie de nabo es muy conocida en toda Galicia. Puede encontrarse a altitudes inferiores a 1.000 metros y especialmente en aquellas zonas más húmedas de la región. "Es una planta muy grande, parecida al apio, y tiene un tubérculo de color amarillo que es venenoso", explica el catedrático en Botánica Javier Cremades para el diario El Mundo.
El 'nabo del diablo' está catalogado dentro de la familia de las apiáceas, conformada por más de 170 especies. La gran mayoría de ellas producen poliacetilenos parecidos a la cicuta, un veneno que puede acabar facilmente con la vida de una persona. Por ello, se desaconseja totalmente su uso para fines culinarios.
Se caracteriza por tener unas hojas parecidas a las del perejil y una flor que adquiere un tono blanquecino. Pero su potencial peligro se encuentra en una neurotoxina denominada enantotoxina. Esta sustancia afecta directamente al sistema nervioso central provocando vómitos y paradas respiratorias hasta acabar con la vida de la persona.
Otros de los síntomas que provoca la ingesta de este tubérculo están: la epilepsia con convulsiones, dilatación de pupilas y una muerte rápida. Tras ser ingerido, daña directamente al cerebro cuando se consume. Debido a que el tubérculo tiene un sabor muy similar al apio apenas se nota su veneno, pero los pacientes no tardan en fallecer por ahogamiento tras ingerirlo.