El Mundial de Qatar está quedando eclipsado por la falta de libertades que caracterizan al país anfitrión, las cuales no afectan únicamente a los jugadores, sino también a todos los aficionados que asistirán a disfrutar del evento. Tanto es así, que algunas naciones como Reino Unido incluso han creado guías de conducta para que sus ciudadanos no tengan problemas en el país árabe.
Hace poco se anunció la prohibición de consumir cerveza con alcohol en las proximidades a cualquiera de los ocho estadios en los que se disputarán los partidos del torneo, pero las limitaciones del régimen catarí van más allá, llegando a controlar las muestras de afecto o el vestuario.
Incumplir las normas podrá suponer ir a la cárcel
Lo de la cerveza es bastante irónico si se tiene en cuenta que el principal patrocinador internacional es Budweiser. Pero así es, el gobierno qatarí, en unión con la FIFA, prohibió la venta y consumo de alcohol en los estadios del Mundial y sus aledaños, limitando el consumo de alcohol a hoteles con licencia o a la Fan Zone de la FIFA, donde para tomar una cerveza mientras ves el partido deben pagar hasta 13 dólares.
Se ven especialmente perjudicados los miembros del colectivo LGTBIQ+, pues Qatar castiga con penas de uno a tres años de cárcel aquellas relaciones que se mantengan entre personas del mismo sexo.
No obstante, y aunque no se haya promulgado ninguna norma o texto que lo recoja, las autoridades qataríes han asegurado que las personas LGTBI que viajen a Qatar durante el Mundial no sufrirán consecuencias legales siempre y cuando, dicen, respeten los espacios públicos sin muestras de afecto.
Las normas de vestimenta también son estrictas. Aunque desde la organización destacan que las personas "generalmente pueden usar la ropa que prefieren", existen recomendaciones que cumplir a la hora de vestir en un país ultraconservador como es Qatar.
"Los hombros y las rodillas deben cubrirse al visitar lugares públicos como museos y otros edificios gubernamentales", aseguran, aunque la recomendación es que las prendas conservadoras sean utilizadas todo el tiempo.
En el caso de las mujeres, desde el gobierno qatarí se pide que no se utilicen prendas con escotes pronunciados y tampoco leggins, por ir demasiado ajustados al cuerpo. Los vaqueros rotos tampoco están bien vistos ni para hombres ni para mujeres, y en el caso masculino, deben evitarse las camisetas sin mangas y aquellas con dibujos o frases ofensivas. Por otro lado, los bikinis y los bañadores solo se podrán utilizar en las piscinas de determinados hoteles.
El consumo de embutido de cerdo también está prohibido, así como llevar consigo imágenes sensualesy contenido explícito para adultos. El consumo de contenido pornográfico podría hacer que la persona sea obligada a pagar una multa y salir expulsada del país porque, según las leyes qataríes, en este país cualquier imagen de este tipo está considerada bajo el delito de "promoción de la pornografía".
La embajada alemana ha sido una de las que ha advertido a sus compatriotas que se abstengan de llevar a Qatar ese tipo de imágenes en sus dispositivos móviles: "la importación de alcohol y material pornográfico, así como libros religiosos, está prohibida. Tampoco se permite la importación de alimentos de carne de cerdo. El tráfico de drogas puede acarrear la pena de muerte", avisa.
El gobierno de Qatar estará con ojo avizor a que no se incumpla ninguna norma, vigilando de cerca los medios de comunicación que cubran el Mundial.