Una mujer ha sido detenida por las autoridades al ser captada por las cámaras de seguridad en la ciudad de Taichung, en Taiwán, mientras se metía en una máquina para robar muñecos de peluche.
Con ayuda de su tamaño y gran elasticidad, la mujer de 34 años de edad e identificada como Tsai, empleó una escoba para acercar los muñecos a ella. Acto seguido, introdujo su brazo para recoger los premios y comenzó a sacar uno por uno los peluches. Parece que no fue suficiente y decidió introducir su cuerpo entero por la ranura y de esta forma continuar con la extracción de su preciado botín.
En total la mujer consiguió siete muñecos en media hora aproximadamente. Luego los repartió entre niños de su vecindario. Por este caso, Tsai ha sido detenida por las autoridades debido al delito de robo.
Gracias a las cámaras
Una vez más, las cámaras de seguridad nos han dejado vídeos sorprendentes y algo surrealistas. A la mujer que se introduce en una máquina con el fin de robar juguetes, hay que sumarle al niño que, por aburrimiento, reto, curiosidad, o a saber qué, decidió orinar en los botones de un ascensor en la ciudad de Chongqing.
La gracia de su trastada le duró poco ya que cuando llegó a su planta no podía salir. Y es que seguramente la orina bloqueó los botones y el ascensor se quedó parado. Se asustó tanto de lo que había hecho, que comenzó a saltar. Sin embargo, el ascensor apagó sus luces mientras que los botones se volvían locos y parpadeaban sin parar. Así que el niño se quedó atrapado durante varios minutos hasta que fue rescatado. Pudo ser un buen escarmiento. No sería descabellado entrevistar algún día a estos protagonistas para saber qué se les pasa por la cabeza.
