Si hay una enfermedad devastadora ess es la lepra, una enfermedad que va causando lesiones en la piel y sistema nervioso llegando a incluso a provocar la pérdida de las extremidades. Sajida Begum, una mujer hindú de 65 años, padece dicha enfermedad y ha sido despreciada por su familia, por lo que actualmente vive en un hospital desde hace diez años con la única ayuda de una pensión a causa de dicha enfermedad que le ha sido retirada hace ya tres meses a causa de la propia lepra.
Begum, a causa de la enfermedad, ha perdido la vista y en los últimos tiempos también ha perdido los dedos de las manos y de los pies lo que le ha provocado que no pueda identificarse como receptora de la pensión. La razón de que no pueda identificarse por este hecho es porque en la India poca gente tiene documentación y el sistema gubernamental utiliza un biométrico denominado Aadhaar. Dicho sistema usa el reconocimiento del iris o de las huellas dactilares para la identificación y como hemos mencionado Sajida ha perdido dichos identificativos a causa de la lepra y por tanto no se la puede reconocer como receptora de la pensión.
La pensión que recibía Sajida es el único sustento que poseía de una cuantía de 1.000 rupias (unos 14€ al cambio), una cantidad aparentemente ínfima pero que a causa de tan terrible enfermedad ha perdido. Su historia, según el hospital donde vive, es otra más a las que añadir al propio centro donde hay otros 50 pacientes en su misma situación. Las autoridades del centro han solicitado que el gobierno haga una excepción en este tipo de casos donde la identificación es imposible. Desgraciadamente a día de hoy no existe una legislación que contemple el caso de Sajida por lo que solo queda esperar que el gobierno tome en cuenta esta situación y permita la modificación de dicha identificación para este tipo de casos.
Tras la notica lanzada por el medio The Indian Express varios ciudadanos hindúes han empatizado con la situación apoyando la petición del hospital. Cabe destacar el caso de Yogesh Ranganath, un joven de 28 años que se han ofrecido a pagar la pensión a Sajida hasta que el gobierno modifique la ley para que la pueda cobrar como es su derecho. Además, acude a visitarla cada lunes para apoyarla y darle ese dinero personalmente.