Con apenas tres años fue ingresada en el hospital de Arizona Hacienda Healthcare en 1992 por una grave lesión cerebral y pasó 27 años de su vida en estado vegetativo alimentándose de forma artificial. Ahora, tras ser agredida sexualmente en el centro médico en el que permanecía ingresada, el pasado 29 de diciembre dio luz a un bebé fruto de una violación.
Es la historia de la mujer cuyo caso ha conmocionado a Estados Unidos y ha provocado indignación en todo el mundo. Los padres de la víctima no han querido que se revele su identidad y, por el momento, solo se conoce que pertenecía a la tribu Apache San Carlos, según recoge ABC.
Por su parte, la familia ha contratado al abogado John Michael que en un comunicado señalaba que el bebé crecerá en una familia que le quiera y estará bien atendido. "La familia obviamente está indignada, traumatizada y conmocionada por el abuso y el abandono de su hija en el centro Hacienda HealthCare. Ellos son conscientes de las persistentes noticias y el interés público del caso de su hija"
El hospital podría haber cometido irregularidades
Ahora, el centro Hacienda Healthcare se enfrenta a una investigación policial por agresión sexual que ya ha provocado la renuncia de su director Bill Timmons. El departamento de Policía de Phoenix ha pedido muestras del ADN de los empleados del hospital de sexo masculino.
Los enfermeros han declarado no tener constancia de que la paciente estuviera embarazada y que los últimos exámenes médicos se realizaron hasta ocho meses antes del nacimiento del bebé. El doctor responsable de aquel chequeo no hizo ninguna mención al respecto y recomendó al personal de la clínica continuar "con la atención actual".
Los enfermeros se dieron cuenta de que estaba embarazada cuando escucharon los gemidos de la mujer. Bill Timmons ha comentado a la revista PEOPLE: "Tengo la impresión de que el personal de allí no tenía ni idea de que esta señora iba a tener un bebé".
El portavoz de Hacienda Healthcare, David Leibowitz, ha asegurado estar totalmente comprometido "para llegar a la verdad de lo que, para nosotros, representa un asunto sin precedentes". A raíz de este caso se ha iniciado una petición para cerrar el centro y ya lleva más de 4.000 firmas.