A nadie nos gusta perder un avión, no solo por el dinero de los billetes, sino también por el estrés que genera llegar hasta la puerta de embarque y que esta se encuentre cerrada. Por ello, no es de extrañar el episodio que protagonizó una pareja en el aeropuerto de Pekín hace unos días. Ante la negativa de la tripulación del avión a embarcar, la pareja inició una protesta sentándose en el suelo de la pista de despegue, justo debajo del avión, impidiendo que este despegara y retrasando así el inicio del viaje unos 20 minutos.
Al parecer, la pareja llegó tarde al vuelo de Air China alegando que nadie les había informado de la hora de embarque, según recoge China Daily, a pesar de que luego se descubrió que la llevaban impresa en los billetes. Desesperados por la posibilidad de perder el viaje, la pareja golpeó presuntamente a varios empleados para poder acceder a la pasarela de despegue del avión, aunque la puerta de este ya estaba cerrada.
A pesar del desesperado intento por embarcar, la tripulación de cabina rechazó dejar entrar a la pareja en el vuelo, lo que enfureció a la mujer y la llevó a iniciar una peligrosa protesta: la pasajera se sentó debajo del avión y amenazó con no moverse de la pista a no ser que se les permitiese ocupar sus asientos dentro del avión para viajar a su destino.
Para poder solventar la situación tuvo que acudir la policía del aeropuerto, aunque la protesta ya había provocado un retraso de 20 minutos en el vuelo. Según declararon varios testigos, la protestante se mostró muy emocionada al ver llegar a los agentes y comenzó a agitar sus brazos en forma de saludo.
Los testigos también declararon que, ante la presencia de los oficiales, el marido arrastró a su mujer hacia el coche de la policía muy enfadado. Finalmente el vuelo pudo iniciar su despegue sin más complicaciones. El aeropuerto ha decido tomar medidas contra la pareja, que pasarán retenidos cinco días en un centro de detención.
Esta historia es una muestra más de las acciones desesperadas que es capaz de hacer la gente cuando pierde un avión. Recientemente se hacía viral el vídeo en el que un pasajero saltaba corriendo a la pista de despegue de Barajas para intentar alcanzar a un avión de Ryanair que ya estaba en marcha, lo cual, además de peligroso, evidenció las carencias en seguridad del aeropuerto.
