Phil Spector, el mítico productor de los Beatles, ha muerto a los 81 años en la cárcel, donde cumplía pena por asesinato, según ha publicado la BBC. La causa de su fallecimiento, se ha confirmado poco después, ha sido por coronavirus.
El músico y productor llegó a la banda en el año 1970 gracias al manager Allen Klein, que llevó a Specter a Reino Unido para que les ayudara a producir un álbum con las sesiones de su fallido Get Black. Spector pasará a la historia, ya que de aquella reunión y de su trabajo saldría uno de los grandes lemas de la banda, 'Let it be', aunque no todos quedaron contentos, en especial Paul McCartney, que quiso rehacer el trabajo y consiguió lanzar su propia versión en 2003, 'Let It Be... Naked'.
Spector fue considerado un auténtico genio en el ámbito musical por su creación del denominado 'muro de sonido'. Se trata de una ténica consistente en grabar múltiples pistas de sonido y superponerlas para crear un sonido compacto y apabullante. Una técnica que ha sido muy influyente en otros músicos y grupos como The Beach Boys, quienes por influencia de Spector utilizaban esta misma técnica.
Su vida personal, objeto de múltiples sombras
La vida personal de Phil Spector, sin embargo, siempre fue convulsa. Desde el año 2009 cumplía condena por homicidio en segundo grado en la prisión de Stockton. Estaba condenado por el asesinato de la actriz Lana Clarkson, cuyo cadáver se encontró el 3 de febrero de 2003 con una herida de bala en la boca.
El productor declaró en su momento que se trató de un suicidio accidental. En aquel momento permaneció en libertad bajo fianza hasta que comenzó el juicio en marzo de 2007. El 26 de septiembre de ese mismo año, el juicio se declaró nulo después de que los doce miembros del jurado no pudieren alcanzar un veredicto.
Un año después, en octubre de 2008, se repitió y en abril de 2009 fue declarado culpable, condenado a un mínimo de 19 años de cárcel revisarle, por lo que solo podía pedir la libertad condicional hasta que llegara el año 2028.