Los recortes que autonomías como Madrid o Andalucía han aplicado durante los últimos años en la Seguridad Social están mostrando su peor cara. La última: una mujer de 64 años ha muerto tras esperar 12 horas en las Urgencias del Hospital de Úbeda (Jaén) sin que nadie la atendiese.
La paciente había sido trasladada desde una residencia de mayores de la cercana localidad de Quesada. Nadie la acompañaba y los médicos la habían dejado tumbada en una camilla. El problema, en este caso, es que ningún profesional volvió a percatarse de su presencia.
Los hechos han sido confirmados por la Delegación de Igualdad, Salud y Políticas Sociales de Jaén y tuvieron lugar el asado 21 de diciembre. La anciana había sido trasladada por decisión de la residencia en la que vivía y fue acompañada por una auxiliar. Sin embargo, la responsable regresó al centro y confió en la tutela del Hospital.
La mujer llegó a las 14:00 horas y allí esperó sin suerte a que la atendieran, tal y como ha publicado el diario Ideal de Jaén en su edición del jueves. Ningún médico tuvo constancia de que la mujer precisaba ayuda.
Según las primeras informaciones, todo apunta a que la llamaron por megafonía, sin tener en cuenta que la mujer no se encontraba en condiciones de contestar. Por todo ello, al parecer, los médicos consideraron que había abandonado el centro y decidieron atender a otros pacientes, teniendo en cuenta el colapso de algunos centros.
Nadie preguntó por ella hasta que pasaron doce horas. En plena madrugada, un profesional preguntó por la identidad de la mujer que ocupaba la camilla. Cuando fueron a atenderla, solo pudieron confirmar su fallecimiento.
Los médicos del hospital pusieron inmediatamente en conocimiento de la autoridad judicial y del hijo de la mujer todo lo sucedido.
Segunda polémica en la sanidad andaluza en solo una semana
El colapso de las instalaciones en el hospital de Marbellaha provocado que los pacientes se encuentren hacinados en los pasillos mientras que se viola su derecho a recibir una cama hospitalaria.
Los médicos no dan abasto y denuncian que este tipo de situaciones se repiten con gran frecuencia. Denuncian que las instalaciones no cuentan con las dimensiones adecuadas y califican de "inhumano" la precariedad en la que se ven obligados a atender a los enfermos.
Delante del centro colapsado se encuentra otro hospital público completamente abandonado y de mayores dimensiones. Se trata del Hospital de Marbella, cuyos restos han quedado en el olvido a causa de la quiebra de la constuctora que recibió la factura de su construcción. Mientras tanto, los vecinos de la zona se muestran indignados ante la violación del derecho a la Sanidad pública y gratuita.
