El presidente de la petrolera rusa Lukoil, Ravil Maganov, ha muerto este jueves tras caer por una ventana del Hospital Clínico Central de Moscú en el que se encontraba ingresado, según han informado las agencias rusas Interfax y TASS.
"Maganov se ha caído por la ventana de su habitación en el Hospital Clínico Central esta mañana. Ha muerto a causa de las heridas", ha informado una fuente anónima en declaraciones a la agencia de noticias Interfax.
La agencia TASS apunta, citando a fuentes de las fuerzas del orden, que el suceso ha ocurrido a las 07:00 hora de Moscú (06:00 hora peninsular española) y que el motivo se ha registrado como una "muerte por suicidio".
Maganov, de 67 años, estaba ingresado en el hospital tras haber sufrido un ataque cardíaco y tomaba antidepresivos, según ha informado la misma fuente. El presidente de Lukoil trabajaba desde 1993 en la petrolera en puestos ejecutivos. Fue primer vicepresidente ejecutivo y supervisó las exploraciones y producciones.
La junta directiva de Lukoil nombró a Maganov como presidente de la compañía en lugar de Valeri Greifer, que falleció en abril del mismo año.
Lukoil achaca la enfermedad a una "enfermedad grave"
La compañía Lukoil ha emitido un comunicado en el que se despiden de Maganov y achacan la muerte a una enfermedad: "Lamentamos profundamente anunciar que Ravil Maganov [...] ha fallecido tras una enfermedad grave", señalan en su comunicado.
Lukoil fue, el pasado mes de marzo, una de las pocas empresas rusas que pidió el fin de la ofensiva de Moscú en Ucrania, que acarreó una oleada de sanciones occidentales encontrando de los grandes grupos y altos representantes rusos.
A finales de abril, además, dimitió el millonario Vaguit Alekperov, que ejercía como presidente del grupo empresarial. Una semana antes, había sido incluido en una lista negra de personalidades rusas sancionadas por el Reino Unido.
Magnates del gas
Estos hechos se unen a los registrados la pasada primavera, cuando dos multimillonarios rusos, Serguéi Protosenya y Vladislav Avayev, magnates y empresarios del gas, asesinaron presuntamente a sus familias antes de quitarse la vida, simultáneamente, en Rusia y España.
Los Mossos d' Esquadra investigan desde el pasado 20 de abril la muerte de una familia en una vivienda de la urbanización Els Pinars de Lloret de Mar (Girona), después de hallar tres cadáveres. Según explicaron fuentes policiales el hombre, Serguéi Protosenya, de 55 años, habría matado a su mujer, de 53 años, y a una hija, de 16 años, y después se habría suicidado ahorcándose desde una barandilla en el jardín de la finca. Los cadáveres de las mujeres aparecieron tapados con sábanas y numerosas heridas por arma blanca.
El mismo día, pero con 3.500 kilómetros de diferencia, en Moscú, Vladislav Avayev, ex alto funcionario del Kremlin y ex vicepresidente de Gazprombank, era encontrado muerto en su apartamento de Moscú junto a los cuerpos de su mujer, Yelena, de 47 años y su hija menor, María, de 13. La policía rusa señaló que el hombre tenía un arma en la mano y los tres cadáveres presentaban heridas de bala.