La jugadora de baloncesto Sydney Wilson, integrante de la Asociación Nacional para el Progreso de las Personas de Color (NAACP), ha muerto tiroteada por un agente de policía a los 33 años.
El policía disparó contra la jugadora después de que atacase y cortara la cara con un cuchillo al agente, en la localidad de Reston (Virginia). Dicho ataque y los disparos posteriores quedaron grabados por la cámara corporal del agente.
BLM claimed that Sydney Wilson was unjustly killed by racist cops.
— iamyesyouareno (@iamyesyouareno) October 15, 2024
Here's the body cam footage—judge for yourself. pic.twitter.com/Q61hwkDplI
A pesar de que los servicios de emergencia se desplazaron inmediatamente al lugar e intentaron mantener sus constantes vitales, la deportista finalmente falleció en el hospital.
Una intervención policial
El agente había acudido al bloque 118000 de Sunrise Valley Drive, en Reston (Virginia), puesto que el servicio de emergencias había recibido una alerta médica por una crisis derivada de la enfermedad mental que padecía la deportista.
Cuando llegó la policía, Sydney Wilson atacó al agente de policía, Peter Liu, miembro del Departamento de Policía del Condado de Fairfax, en mitad de una crisis nerviosa.
"Podría haber sido mucho, mucho, mucho peor; la herida cortante, profunda y punzante que recibió fue en la parte superior de la frente", ha expresado el Departamento de Policía, que ha justificado la intervención de agente de policía durante el servicio mostrando las heridas que sufrió en rostro y torso.
El responsable policial de Fairfax, Kevin Davis, ha respaldado la actuación del agente de policía, identificado con el nombre de Peter Liu, del que se ha especificado que llevaba más de 14 años de servicio. "Hizo las cosas para las que le entramos y esperamos que haga", justificó.