Arabia Saudí está hoy de luto tras confirmarse la noticia de la muerte del hijo del emir de Sharjah, Jalid bin Sultan al Qasimi, en Londres. Según la prensa local británica, el hijo del sultán habría fallecido en circunstancias desconocidas, más allá de la larga noche de sexo y drogas de la que habría disfrutado.
Al Qasimi podía presumir de haberse mantenido alejado de la actividad política e institucional de su padre, Sheikh Sultan III, pues habría alcanzado la fama dentro de la moda en las pasarelas de Londres y toda Europa, como diseñador y modelo. La compañía que dirigía ha obtenido recientemente el visto bueno de toda la crítica especializada tras la colección de ropa de alta costura que lanzó para la temporada de primera/verano de 2020, en la que destacaban los elementos árabes que tanto caracterizaban al diseñador por sus raíces.
El que hubiera vestido a Lady Gaga, Florence Welch y Cheryl Cole fue enterrado el pasado 3 de julio en el emirato de Sharjah, uno de los siete que conforman los Emiratos Árabes Unidos. Su padre, cuya oficina de representación y prensa ha compartido las imágenes del concurrido funeral, ha decretado tres días de luto en todo el país y el alzamiento de las banderas a media asta durante este tiempo.
Su firma de moda fue lanzada en 2008 y pese a que no colaboró demasiado con su padre, fue jefe del Consejo de planeamiento urbano del emirato durante algún tiempo, en el que se encargó de los proyectos que tenían que ver con la creación y surgimiento de nuevas infraestructuras. Tenía gran dominio del francés y el español tras sus estudios en el University College de Londres, en el que completó su carrera como arquitecto, aunque no le dio la misma salida que a su faceta como diseñador, la cual desarrolló gracias a las clases en moda femenina que recibió en el Central Saint Martins.
¿Las razones? Un misterio...
El misterio en torno a las razones por las que se ha producido el fallecimiento del jóven no está del todo resuelto. Su padre ha hecho esfuerzos grandes para que las verdaderas causas de la muerte no trasciendan, pues tendrían que ver con la fiesta que tuvo lugar en el exclusivo barrio de Knightsbridge de Londres, ciudad donde vivía desde los 9 años, al que acudió expresamente para el evento.
Sultan bin Mohamed al Qasimi, nombre completo del progenitor emiratí, ha querido expresar en público que su hijo ya está "en cuidado de Dios". La policía habría hecho públicas algunas pistas que conducirían a "una fiesta en la que algunos invitados tomaban drogas y tenían sexo", según apuntan algunas fuentes cercanas a lo ocurrido, quienes no descartan que Jalid muriera como "resultado de la ingesta de drogas", ya que, junto a su cuerpo, se encontraron drogas de clase A como por ejemplo, el dicanol, la heroínam el LSD o MDMA.
Lo mismo le ocurrió a su hermano, el que allá por 1999 estaba destinado a ser heredero del trono de su padre, Mohamed bin Sultan bin Mohamed al Qasimi, que falleció por una sobredosis a los 24 años, también en Inglaterra. Por aquel entonces, su cuerpo fue hallado en un baño de su palacete, ubicado en East Grinstead, por uno de los escoltas del príncipe heredero, rodeado de jeringas y una corbata atada a uno de sus brazos.