Natalia Borodina, una agente inmobiliaria rusa que vivía en Cannes, Francia, se encontraba de vacaciones en la República Dominicana con su hijo y una amiga ucraniana, Ivanna Boirachuk, cuando tuvo el accidente.
El pasado martes, a causa de la lluvia, las dos amigas decidieron ir a dar un paseo en coche por las afueras de Punta Cana sin el niño. Los agentes afirman que habían tomado alguna droga psicoactiva.
Durante el viaje, Borodina, que viajaba de copiloto, decidió quitarse la parte de arriba del bikini y, únicamente con la parte inferior, ponerse a cantar y bailar en el coche. Su amiga la grababa con una mano mientras con la otra conducía.
El instante del accidente
Hubo un momento en que la rusa decidió sacar medio cuerpo por la ventanilla del coche y quedarse semi-colgando. Como la conductora la estaba grabando, no fue capaz de ver una señal de tráfico a la que se acercaban a gran velocidad y que impactó con la cabeza de Borodina y le hizo salir despedida del vehículo.
Tras el accidente, la mujer fue trasladada al hospital Hospitén de Verón, en La Altagracia y aunque entró con vida, su estado crítico y las heridas que había sufrido tanto por el impacto como por la caída del coche fueron intratables. Murió a las pocas horas.