A pesar de que ir a la peluquería sea un acto totalmente rutinario y que no tiene por qué conllevar nada negativo, Karine de Oliveira, una mujer brasileña de 34 años, murió después de ir a aplicarse un tinte para el pelo. Según explicó la televisión brasileña Journal da Record, murió tres días después a causa de la reacción alérgica que le ocasionaron los componentes del tinte.
Según narraron los testigos para esta televisión, poco después de comenzar el procedimiento de tinte de pelo, la víctima pidió que le lavaran el pelo inmediatamente porque comenzó a sentir molestias y un fuerte cosquilleo en las manos. Poco después comenzó a sentir sofocos y terminaron llamando a una ambulancia.
Los efectos fueron irreversibles
Estuvo tres días en la unidad de cuidados intensivos de un hospital, donde tuvieron que atenderla por sufrir un paro cardíaco que tres días después la llevó a la muerte cerebral. Dado que la situación era irreversible, quedó en decisión de sus familiares cumplir su última voluntad: donar sus órganos, como así sucedió.
Tal y como explicaron los paramédicos que acudieron en la ambulancia, ella ya había quedado inconsciente, con las pupilas dilatadas, sin pulso y la piel morada como consecuencia de la falta de oxígeno.
Esto ha despertado las alarmas en Brasil y en el mundo de los salones de belleza, dada la importancia de conocer cuáles son las alergias que tiene cada uno. En el caso del salón al que fue Karine de Oliveira, alegan que era la primera vez que se realizó un tinte con ellos, por lo que no sabían que ella sufriría esta reacción porque además ella tampoco lo mencionó. Además, fue ella quien entregó al salón de belleza este tinte para que se lo aplicasen.