A estas alturas todo el mundo ha oído hablar de 'Skam' alguna vez. Sin embargo, no todos se atreven a verla. ¿Una serie de adolescentes que se enamoran, van a fiestas y se emborrachan? A priori puede parecer que ya lo hemos visto antes, pero poco hace falta para darse cuenta que 'Skam' es completamente innovadora. Partiendo de que en Noruega, su país de origen, los capítulos constan de varios clips publicados en la página web y que luego son emitidos de forma convencional en la televisión. Pero dejando a un lado su peculiar manera de emisión, son varios los aspectos que convierten a esta serie en una de las mejores de la década.
1 La adolescencia desde un punto de vista realista
Estábamos acostumbrados a que las series sobre jóvenes que van al instituto tuvieran un marcado tono tragicómico y melodramático. Suicidios, drogas en los baños, fiestas sexuales con profesores, tiroteos entre cambios de clase y toda clase de giros telenovelescos posibles. 'Skam' presenta a un grupo de adolescentes normales y corrientes, con las vivencias y problemas cotidianos de esa etapa. Lo que la hace interesante no es el qué sino cómo lo cuenta, un acercamiento a esa edad lo más natural posible que nos hace empatizar con los personajes mucho más rápido. Además, rara vez veremos a un adulto hacer acto de presencia durante los capítulos. La serie se centra en ellos, los adolescentes.
2 Un nuevo escenario: Noruega
Habrá gente que piense que una serie en la que se habla noruego y subtitulada es un inconveniente que echa para atrás, pero todo el que ha visto 'Skam' ha acabado diciendo en algún momento de su vida "Takk" en vez de "gracias". Con esta serie el espectador sale del contexto habitual americano o español y descubre un nuevo idioma y un nuevo estilo de vida, el de Noruega. Los protagonistas viven en Oslo: otra cultura, otro clima, otro tipo de planes. Todo es diferente para el enorme público extranjero que sigue la ficción.
3 Su peculiar desarrollo
Otro a punto a favor de 'Skam' es su duración: la media es de 20-25 minutos, con excepciones de capítulos más cortos y otros más largos. Todo es bastante impredecible, el episodio acaba de manera que no puedas prever el final. La serie está formada por temporadas cortas, de unos once o doce capítulos en los que pueden ocurrir muchísimas cosas o por el contrario, que una conversación entre dos personajes acapare casi la totalidad del tiempo, con sus silencios, gestos y miradas.
4 Personajes perfectamente definidos
'Skam' muestra la amistad desde un punto de vista muy real: un grupo (especialmente el de ellas) heterogéneo, con personalidades completamente contradictorias, pero unido por circunstancias que les llevan a quererse e importarse. Y además de eso, ¿cómo es posible que una serie donde cada temporada hay un protagonista diferente exista tal evolución de los personajes? En la primera lo fue Eva, en la segunda Noora, en la tercera Isak y en la cuarta, actualmente en emisión, Sana. Y es que en Skam los personajes han intervenido en la serie antes de ser protagonistas, y una vez dejan de serlo no desaparecen, sino que siguen contribuyendo a las tramas y al desarrollo de la serie.
5 La banda sonora
En pocas series se da la importancia que en 'Skam' tiene a la banda sonora. Cada momento está perfectamente ambientado con música de lo más diversa: desde clásicos de Michael Jackson, Britney Spears o Queen, grupos como Radiohead o Coldplay, y sobre todo, éxitos pop recientes de la mano de The Weeknd, Hozier, Lorde o Selena Gomez, sin dejar de lado música alternativa nórdica como Robyn y mucha música electrónica. Un arsenal de temazos que conectan con los espectadores y que por sus referencias actuales la enmarcan dentro de una época, esta que estamos viviendo.
6 La juventud del siglo XXI
Pero no sólo con la música se hace referencia a esta década y este siglo. 'Skam' no ha dado de lado la realidad de las redes sociales, que han cambiado el mundo y la forma de comunicación que tienen las personas. Así, los personajes tienen una nueva forma de relacionarse que va más allá de la típica llamada de teléfono. El smartphone y las conversaciones en el chat de Facebook son fundamentales, ya que muchos de los detalles que marcan el devenir de las tramas se producen a través de las nuevas tenologías.
7 Los temas que trata
No es novedad que en una serie de jóvenes se hable sobre perder la virginidad, el descubrimiento de la sexualidad o problemas como la bulimia. Pero 'Skam' no se excede en los dramas personales de los muchachos. En otro momento habríamos presenciado una conversación muy intensa de un chico saliendo del armario, pero aquí el chaval lo hace por mensajes de texto con sus padres y de una manera muy natural con su mejor amigo, dando muestra que la sociedad ha evolucionado y que las dificultades e inquietudes de los jóvenes no tienen por qué ser el eje de la ficción.