El 9 de noviembre se cumplieron cuatro años de la muerte de Cristina Ortiz, más conocida como la Veneno, icono trans que, desde que fue descubierta en los años noventa por el programa 'Esta noche cruzamos el Mississippi' de Pepe Navarro, se convirtió en la cara más visible de un colectivo que estaba condenado a la marginalidad. Tuvo una vida llena de luces y de sombras, marcada por el rechazo de su familia, la prostitución, relaciones tóxicas, violencia y hasta el paso por la cárcel. Sin embargo, con su muerte en 2016 nació el mito.
AtresPlayer Premium ha vuelto a traer a primera línea a aquella controvertida mujer con la serie 'Veneno'. La creación de Los Javis se ha convertido en un verdadero fenómeno que ha servido no solo para humanizar la figura de Ortiz, sino para dignificar a un colectivo, el de mujeres trans, que aún hoy en día sigue sufriendo odio, rechazo, falta de oportunidades y violencia.
Telecinco ha querido sumarse al carro y, con motivo del cuarto aniversario de su muerte han dedicado tertulias en algunos de sus programas, como 'Socialité' y 'Viva la vida'. Pero mientras la serie se ha ganado los aplausos de crítica y público, Mediaset ha optado por la polémica que ha acabado por estallar en 'Sálvame'. El espacio presentado por Jorge Javier Vázquez se trasladó hasta Adra, pueblo de Ortiz, para hablar con su familia, recordar los episodios más polémicos y lanzar una retahíla de argumentario tránsfobo.
Trini Ortiz, hermana de la fallecida que decidió participar en el programa, incluso se mostró molesta por el cariz que estaba tomando lo que se suponía que iba a ser un homenaje: "Venía con mucha ilusión porque íbamos a hacerle un homenaje bonito, pero no me está gustando lo que se está haciendo. Esto es más mierda. Hace cuatro años que murió, se le podía haber hecho el homenaje el primer año, el segundo o el tercero, y piensas ¿esto qué es, por el triunfo de la serie? A mí me gustan los homenajes a alguien porque se le quiere, no por sacar trapos sucios", criticó.
No obstante, la hermana de La Veneno también fue objeto de críticas al referirse a ella siempre en masculino y con su nombre anterior: "mi hermano Joselito". Sorprendente fue que solo Miguel Frigenti, colaborador del programa de Telecinco, fue capaz de corregir sus palabras: "Si es un homenaje estaría muy bien que trataras a tu hermana como hermana, y no estuvieras constantemente diciendo hermano. Porque tu hermana era una mujer, y no era Joselito. Era Cristina".
"No le has conocido. Respeta a la familia, porque todos le llamamos Joselito. Y si decimos Cristina es por respeto a esos fans que nos ponen verdes si decimos Joselito. Yo le voy a llamar así durante toda mi vida, es mi hermano y toda la vida seguirá siendo mi hermano", respondió Trini.
Especialmente grave fue que Jorge Javier Vázquez defendiera la tránsfoba tesis de Trini. "Si a la familia le decía que le llamaran Joselito, ¿por qué va a ser transfobia? Como si a mí me gusta que me llamen Carmen", espetó el presentador, que llegó incluso a poner en duda la verdad de Cristina, quien en multitud de ocasiones dejó claro que era una mujer. "¿Y por qué te tienes que creer a Cristina y no a su hermana?", preguntó el presentador del programa en el que también se escucharon términos como "travesti" para referirse a La Veneno.
No hemos avanzado nada
Una de los principales pilares de 'Veneno', la serie de Los Javis, fue analizar en profundidad el papel de los medios de comunicación, el precio de la fama y cómo esta acabó, en parte, destruyendo a Cristina Ortiz. De una manera muy certera expone cómo algunos programas se aprovecharon de ella para ganar audiencia en unos años en el que la transfobia era sinónimo de humor. La serie nos ha hecho hacer autocrítica y creer que lo que sucedía a comienzos de los 90 ya no sería posible hoy en día o que los poligráfos en los que participó la vedette en los que fue humillada no podrían tener lugar en nuestra televisión actual.
Lamentablemente y como ha demostrado 'Sálvame', no hemos avanzado nada. La identidad de las personas trans sigue siendo objeto de debate. Es evidente que el programa de Telecinco ha querido aprovechar el tirón de la serie, en la competencia, para ganar algo de audiencia. Algo que es del todo respetable si lo que pretendía ser un homenaje no hubiese acabado convertido en un patético circo.
Si Cristina Ortiz no hubiese tenido suficiente con el rechazo y la violencia que sufrió en vida, también la condenan a sufrirlo después de muerta. La Veneno no fue una persona ejemplar ni mucho menos, pero no por ello se merece menos respeto. 'Sálvame' podría haber optado por trasladarse al Parque del Oeste, donde centenares de personas se acercaron a lo largo del día para llevar flores, velas y bonitos mensajes para recordar a una mujer que abrió camino. Pero en su lugar prefirió debatir sobre su identidad, contando con el testimonio de la familia que la repudió.
No estamos en los 90. Estamos en el año 2020. Y el morbo sigue cotizando más que la dignidad de las personas trans.
