No ha habido tamayazo en el Ayuntamiento de Mucia: el PSOE finalmente se queda con la localidad tras salir adelante la moción con el respaldo de los ediles socialistas, Ciudadanos y Podemos. El PP abandonará el poder tras 26 años ininterrumpidos. Los concejales de Ciudadanos se habían atrincherado durante los últimos días en un hotel de Madrid, situado en una ubicación desconocida, con el objetivo de evitar cualquier situación parecida a la vivida en el grupo regional, donde varios ediles tránsfugas finalmente dinamitaron los planes de acabar con la presidencia de López Miras.
La suma de PP y VOX (14 ediles) no ha sido suficiente para mantener a José Ballesta, del PP, al frente de la Alcaldía. Con ello, se trata de la primera moción de censura que se vive en el Consistorio murciano. El PSOE recupera este Ayuntamiento que no gobernaba desde el año 1995.
La moción de censura en el Ayuntamiento de Murcia se presentó en el mismo tiempo que en el Gobierno regional. En aquella ocasión, Ciudadanos y PSOE se aliaron para desbancar al Gobierno de Fernando López Miras, del PP, al que acusaban de distribuir irregularmente las vacunas contra la Covid-19.
A pesar de que todos los parlamentarios votaron en un primer momento a favor, finalmente no salió adelante porque tres de los seis diputados de Ciudadanos se echaron para atrás. Se trata de Isabel Franco, Valle Miguélez y Francisco Álvarez, todos incorporados al nuevo Ejecutivo conservador.
La moción finalmente no salió adelante porque no tuvo los apoyos necesarios: 21 votos a favor frente a 23 en contra y una abstención. Ciudadanos presentaba como candidata a Ana Martínez Vidal, mientras que su exlíder en el partido (elegida en la época de Rivera bajo un proceso de primarias situado bajo la lupa de la Justicia), Isabel Franco, es una de las tránsfugas.
Un terremoto político
La moción de Murcia, sin duda, ha supuesto todo un terremoto político en plena batalla en el seno del centroderecha en España. La consecuencia más destacable ha sido el adelanto electoral en la Comunidad de Madrid, con Isabel Díaz Ayuso rompiendo su gobierno de coalición con Ciudadanos y organizando una convocatoria electoral para el próximo 4 de mayo.
En Castilla y León, el PSOE también organizó otra moción de censura contra el Gobierno del popular Alfonso Fernández Mañueco. Sin embargo, esta moción no salió adelante, pero dejó dañado al Gobierno porque una procuradora, María Montero, se pasó al Grupo Mixto, dejando al Ejecutivo sin mayoría para continuar la legislatura.
Con estos movimientos, el PP ha empezado un proceso de OPA hostil a Ciudadanos que tiene su máximo exponente en el fichaje de Fran Hervías, exsecretario de Organización del partido, toda una agenda de contactos que puede aportar cuadros a las filas populares y dinamitar la formación naranja desde dentro.