Se llaman Misty Plowright y Misty K. Snow y son las primeras candidatas transgénero dentro de un gran partido en aspirar a un puesto en la política de Estados Unidos. Mientras que la primera se disputará hacerse un hueco en la Cámara de Representantes de EEUU, la segunda hará lo propio para ganar un sillón en el Senado estadounidense. Ambas lograron convertirse en candidatas al vencer en sus primarias en los estados de Colorado y Utah, donde ambas residen respectivamente.
Misty Plowright es una mujer de 33 años residente en el estado de Colorado, uno de los más conservadores del país norteamericano. Trabaja de informática y vive junto a su esposa y un hombre en una relación que ella misma considera poliamorosa. Su mujer y ella viven con Sebastian, un hombre que, según dice, conocen desde hace años. Su relación es tal que en 2014 le compraron un anillo. "Consideramos eso como nuestro matrimonio con él". Plowright afirma que esta relación poliamorosa ha fruncido algunos ceños pero ella está segura de que ni esto ni su género actual importará a los votantes.
La mayor dificultad para Plowright será el hecho de ser demócrata en un estado altamente conservador. Este noviembre tendrá que luchar por el quinto distrito parlamentario contra el candidato republicano Doug Lamborn, en el cargo desde 2007 y con aproximadamente un 60% de apoyo. Ella misma prevé que Lamborn la atacará por su género y su relación a tres, pero no parece estar preocupada por ello. Hace unas semanas ganó las primarias demócratas con más de 13.000 votos frente a su oponente.
En cambio, Misty Snow, de 30 años, es una dependienta de supermercado en Salt Lake City. Snow lo tiene ligeramente más fácil para conseguir su puesto en el Senado el próximo noviembre, ya que ganó a su oponente por 20 puntos porcentuales y casi 10.000 votos. Ahora tendrá que luchar cara a cara con el candidato republicano y favorito, el senador Mike Lee, quién obtendría un 51% de apoyos según las últimas encuestas frente al 37% de Misty Snow. A pesar de ello, es una lucha muy difícil ya que muchos analistas políticos dan a estos dos estados como perdidos para el partido demócrata. Ambas apoyaron al candidato Bernie Sanders y entre sus ideas políticas, las de Snow destacan por pedir la legalización de la marihuana, una reforma judicial y un salario mínimo de 15 dólares por hora.
Muchas son las voces que afirman que, con solo presentarse, Misty Plowright y Misty Snow harán historia. Pero ellas no quieren hacer historia. Al menos Plowright, quien, en declaraciones a The Guardian, afirma que quiere cambiar un sistema político corrupto. Criada por una madre soltera con tres trabajos, es una experta manejando un rifle. "No creo que haya mucha gente en el Parlamento estadounidense que sepa lo que es trabajar duro y no llegar a fin de mes", afirma.
Pero Snow y Plowright no son las primeras personas transgénero en hacer historia en el sistema político estadounidense. Carla Fong, alcaldesa de Silverton en el estado de Oregón, era Stu Rasmussen cuando gobernó en la ciudad desde 1988 a 1992. Tras un proceso de reidentificación, volvió a ser elegida con su nuevo nombre en 2008 y hasta 2014. Algo similar le ocurrió a Victoria Kowalski, la primera jueza transgénero de EEUU. Tras pasar por quirófano en 1991, logró un puesto en el Tribunal Superior del condado de Alameda, en California, hace seis años.
