Huawei, la compañía china de móviles, ha vuelto a recibir un batacazo mientras intenta recuperarse de la guerra comercial entre China y Estados Unidos. Ahora, el Ministerio de Defensa español ha decidido impedir el acceso de los dispositivos Huawei a sus sistemas de información.
La Información ha publicado esta decisión, que provoca que los trabajadores del ministerio no puedan usar sus móviles ni sus tablets de la marca Huawei para acceder a la red; tendrán que obtener móviles de otro fabricante.
Defensa, por su parte, aclara que no es un veto a la compañía, ya que los trabajadores no tienen prohibido usar estos dispositivos, sino que no podrán utilizarlos para conectarse a las redes de uso interno del Ministerio bajo ningún concepto.
El mensaje del Ministerio de Defensa no aclara los motivos por los que han decidido prohibir su uso, pero lo más seguro es que las acusaciones de espionaje tengan algo que ver, ya que la compañía fue acusada de crear redes de telefonía diseñadas especialmente para obtener información de los usuarios, datos que se transmitirían a países como China o Corea del Norte. Huawei, por su parte, ha negado en infinidad de ocasiones estas acusaciones.
El CESTIC busca evitar ataques
España había estado al margen de la polémica, pero ha llegado la primera vez en la que la polémica de Huawei ha alcanzado al gobierno y al acceso al Sistema de Información de Defensa, dependiente del CESTIC (Centro de Sistemas y Tecnologías de la Información y las Comunicaciones).
El CESTIC intentará evitar posibles ataques de fuerzas contra sus redes, como el sufrido el pasado marzo, cuando se cercioraron de que un virus había permanecido en el sistema durante meses. Estas infecciones, además, suelen comenzar con un solo dispositivo comprometido, hasta que se expande a más ordenadores y móviles conectados a la red. Por tanto, la seguridad y confiabilidad de cada dispositivo que se conecta a la red es imprescindible para evitar filtraciones de datos y posibles daños a los sistemas.
La respuesta de Huawei
La reacción de la compañía ha llegado en un correo de prensa, en el que se ha limitado a afirmar que no tienen conocimiento acerca de las restricciones impuestas por el Ministerio de Defensa, dedicando el resto del correo a repetir la postura que llevan aceptando meses, ya que no es la primera vez que Huawei se ve obligada a dar explicaciones.
Todo empezó con las acusaciones de EEUU de que sus sistemas de telefonía están diseñados para espiar a los usuarios y enviar la información a China o Corea del Norte, y luego llegó el veto del gobierno de Trump, lo que provocó que buscaran alternativas para sus socios estadounidenses, teniendo que sacar el Mate 30 Pro sin las aplicaciones de Google.
Huawei, por su parte, vuelve a declarar la falsedad de las acusaciones, asegurando que tienen una "garantía de ciberseguridad de extremo a extremo".