La reina Letizia se ha convertido en todo un icono de la moda. La asturiana marca tendencia y en cada una de sus apariciones públicas se convierte en objeto de todas las miradas por sus estilismos. Que vestido lleva, qué joyas luce, que zapatos ha elegido para la ocasión...
Si hay algo que nunca falta en los estilismos de la mujer de Felipe VI con los zapatos de tacón alto, por lo que ha sorprendido que este verano haya optado la comodidad. Incluso en el tradicional posado de la Familia Real en Mallorca eligió un calzado plano. Pero hay una razón para esto: su salud.
Doña Letizia, según publica El País Semanal, padece metatarsalgia, una enfermedad crónica producida por el uso prolongado de tacones altos. El dolor producido ha llegado hasta tal punto que la reina está llegando a aborrecer los tacones, aunque siga eligiéndolos para gran parte de sus looks. No obstante, este verano ha preferido dar un respiro a sus pies al no tener eventos en los que se requiera une etiqueta tan estricta.
¿Qué es la metatarsalgia? ¿Se puede tratar?
Se conoce como metatarsalgia al dolor o inflamación del metatarso, situado entre la zona media de la planta del pie y el nacimiento de los dedos. El metatarso es un punto sobre el que más peso se apoya al caminar, lo que se multiplica al usar tacones.
Este problema podría provocar malformaciones en el pie al no apoyarlo bien debido a los dolores, e incluso cojera, ya que al andar se tiene un dolor insoportable.
Para tratar los síntomas de la metatarsalgia se requiere reposo, se puede aplicar hielo en la zona afectada y tomar medicamentos para el dolor. Eso sí, es necesario usar un calzado adecuado y usar almohadillas para disminuir el dolor.