Buscar
Usuario

Política

Algunas de las mentiras que hemos escuchado en la campaña del 26-J

La mentira es, a menudo, una técnica política que da muy buenos resultados: empañas la imagen del adversario y, cuando se desvela la verdad, esta no tiene apenas impacto sobre la opinión pública. El daño está hecho. Es por ello que numerosos políticos recurren a ella. En España, como no podía ser menos, también.

Pablo Iglesias dijo en una entrevista realizada en la primera semana de campaña que él sería mejor presidente que Francis Underwood, protagonista de la genial serie de Netflix 'House of Cards' y mago de las artimañas y mentiras políticas. Y, aprovechando esto, nos toca hablar precisamente de las mentiras en política: todos dicen que no las usarán, pero acaban usándolas.

Ya llegamos al final del camino de esta enésima campaña electoral en apenas tres años y, para celebrarlo, os presentamos algunas de las que se han utilizado en el camino hacia el 26-J. Sí, las ha habido.

1 Albert Rivera y "la estrategia de no agresión entre el PP y Podemos"

El 14 de este mes pudimos ver al líder de Ciudadanos divirtiéndose en 'El Hormiguero', donde tuvo que responder a preguntas como "¿Pactaron una estrategia de no agresión el PP y Podemos?", referida al 'Debate a 4' acontecido el día anterior, y en donde parecía querer poner en más aprietos al ausente Iglesias que al presente Rivera. Precisamente, fue esta pregunta la que llevó al primer embuste político que mencionamos hoy, ya que Rivera, no contento con responder afirmativamente, matizó que había visto "unos datos de cruce de declaraciones" que lo hacían "evidente".

Gráfica de alusiones entre los contendientes del debate publicada (El País)
"Gráfica de alusiones entre los contendientes del debate publicada (El País)"

En el gráfico publicado por El País se puede comprobar que, precisamente, a quien más aludió Iglesias en el debate fue al Presidente del Gobierno en funciones y, casualmente, de quien menos habló fue de Albert Rivera, con tan solo dos alusiones (por 24 a Mariano Rajoy). Sin embargo, podría argüir Rivera, Rajoy apenas aludió al de Podemos (tan solo lo hizo en tres ocasiones), pero es que el líder de los populares apenas mencionó a los otros dos líderes allí presentes, siendo Sánchez el más aludido, siguiendo la estrategia de ubicar al PSOE como el verdadero rival, con 15 menciones. Albert Rivera, por su parte, tuvo 9. De hecho, Albert Rivera fue el líder menos mencionado de los tres (13 menciones en total) y su "duelo" con Sánchez fueron meras cosquillas (dos alusiones del socialista al liberal y seis menciones del liberal al socialista). La estrategia de no agresión, en todo caso, parece ser otra.

En esa misma entrevista en 'El Hormiguero', a Albert Rivera le dio tiempo a acusar a Irene Montero (portavoz de Podemos en el Congreso) de ir en el coche de Moragas (director de campaña del PP) tras una de las reuniones preparatorias de dicho debate. Al día siguiente, tuvo que rectificar y matizar que no fue en el de Moragas, sino en el de Ayllón, número 2 de Soraya Sáez de Santamaría. Fue, sin duda, una entrevista fructífera.

2 Rajoy y los indultos por corrupción

Entendemos que los debates son siempre aireados y que es fácil ponerse nervioso y cometer imprecisiones, más aún si, como Rajoy, no eres muy diestro -ni muy asiduo- a los debates televisivos, sobre todo al compararlo con Iglesias y Rivera, adalides de la nueva política.

Sin embargo, hay afirmaciones que, por contundentes, se presuponen verdaderas. Este es el caso del "No he dado ningún indulto por corrupción en mis cuatro años de presidente", del que se hizo eco hasta la cuenta de Twitter de las Nuevas Generaciones de Madrid.

Es, además, curioso, que incurra el Presidente del Gobierno en tal embuste cuando el famoso exministro Gallardón fue desmentido en marzo de 2014 tras realizar una declaración muy similar. Ya por entonces, el gobierno del Partido Popular había indultado a cuatro concejales del PP de Málaga (entre ellos el ex-alcalde malagueño), un ex alto cargo de Jordi Pujol y un empresario (ambos militantes de Unió), una miembro de la ejecutiva del PSOE de Sevilla y una funcionaria del Ayuntamiento de Alicante. En total, ocho indultos en el ecuador de la legislatura.

Claro que, como hizo Gallardón en su momento, Rajoy puede apelar a que "corrupción" no es "un concepto jurídico que figure en el Código Penal". Y es cierto, si bien calificamos de corrupción delitos como malversación o prevaricación, sí presentes en el Código Penal.

3 El lío de Pablo Iglesias con el despido 

Es evidente que la reforma laboral que aprobó el gobierno del Partido Popular hurgó en la herida realizada por Zapatero allá por aquel lejano año 2010, recortando derechos laborales. Sin embargo, en ese recorte de derechos no se produjo el que Iglesias mencionó en el 'Debate a 4'.

Y es que Iglesias dijo que Rajoy bajó la indemnización por despido a 20 días por año trabajado, lo cual es falso. De hecho, los 20 días por año trabajado era una indemnización que ya se aplicaba a quienes sufrían un despido que un juez calificara como procedente, tanto antes como después de la reforma laboral de 2012. Esto no quiere decir, ni mucho menos, que el gobierno del PP no abaratara el despido: lo hizo, pero en el caso de los despidos improcedentes de los contratos firmados después de 2012 (para evitar el carácter retroactivo), pasando de los 45 días por año trabajado de la reforma laboral de 2011 a 33 días por año trabajado. También es posible que el candidato de Unidos Podemos se refiriera a los despidos colectivos (mediante el ERE), ya que, si bien la indemnización era la misma que actualmente (20 días por año trabajado), al requerirse una autorización administrativa del Ministerio de Empleo era más sencillo que empresa y trabajadores consiguieran acordar una cantidad mayor de esos 20 días que estipulaba la ley. Actualmente, al no requerirse de esa autorización, se hace imposible aumentar los días dictados por la ley. Pese a todo, Pablo, lamentamos decir que lo que la ley dictamina también en este caso es exactamente lo mismo que con la reforma de Zapatero.

4 Pedro Sánchez y el problema de reciclar datos

Todos los que hayamos cursado una carrera recordaremos esos horribles trabajos que se hacían eternos, pero que siempre había un grupo en clase que conseguía pedir a un amigo el mismo trabajo de otro año anterior. Simplemente, le cambiaba el nombre y a disfrutar de la libertad. Si ese compañero eres tú, te odio. Si no, bienvenido al club.

Quien sí parece haber sido de ese tipo de alumnos es Pedro Sánchez, a tenor de su error con los sueldos que se pagan en España. Y es que, en el debate a cuatro realizado previamente a las elecciones del 20-D, reveló un dato asombroso: Desde que llegó Rajoy a Moncloa, los sueldos de los trabajadores se habían rebajado en 40.000 millones de euros. Y, efectivamente, así fue: entre 2011 y 2014 los españoles percibimos, en total, 38.971 millones de euros menos en sueldos. Sí, es complicado encontrar a Sánchez en un renuncio en cuestión de guerra de datos y cifras.

Sin embargo, Pedro Sánchez se la jugó y decidió rescatar este dato, suponemos que por la enorme cifra que maneja, para esta nueva campaña. Y reciclar un argumento, como ocurría en la universidad con los trabajos, está bien... si no te pillan. Y, por desgracia para Pedro, entre las anteriores y las nuevas elecciones hemos cambiado de año y, por ende, el INE ha actualizado los datos: ahora no medimos entre 2011 y 2014, sino hasta el final de la legislatura pasada: 2015. Y, precisamente, en 2015 el total de los sueldos percibidos por todos los trabajadores en España subió tanto que el déficit entre 2011 y 2015 se redujo hasta los 20.000 millones. Sí, en España se pagan menos sueldos que cuando Mariano Rajoy llegó al gobierno, pero no, Sánchez, ya no es tanto. De esta forma, Pedro Sánchez convirtió un buen argumento contra Rajoy en una mentira, ya obsoleta.

Artículos recomendados

Artículos relacionados
Contenidos que te pueden interesar