Con la llegada del buen tiempo y la normalización completa tras años de restricciones marcados por la pandemia que han derivado en una estabilización del sector turístico, las compañías aéreas vuelven a tomar relevancia y cuentan con la misma calidad del servicio que en los tiempos anteriores a la crisis sanitaria, según indica la Organización de Consumidores y Usuarios, que ha elaborado un estudio con los datos de experiencia de 19.746 pasajeros de 11 países con 37 aerolíneas.
Tres empresas de vuelos mantienen los primeros puestos. Se trata de Luxair, con 86 puntos sobre un total de 100; Emirates, con 84 puntos y Qatar Airways, con 83 puntos. Estas compañías destacan por la puntualidad de sus vuelos, la comodidad, las facilidades para transportar el equipaje, el buen trato de su personal o el buen funcionamiento de sus páginas web o su app.
También destaca en el estudio una aerolínea española, la canaria Binter, que logra 80 puntos y se corona con el cuarto puesto. En este caso, destaca por su buena labor en el embarque y la diligencia de su check-in en el aeropuerto. También destacan Air Europa, que logra el puesto 14 con una valoración de 76 puntos; Iberia Express, con una posición 15 y 76 puntos; así como Iberia, que logra 74 puntos en el puesto 18.
Las peor valoradas
Por otro lado, la compañía aérea peor valorada por los pasajeros es Aer Lingus, que ha logrado un total de 59 puntos. Se trata de una aerolínea con base en Irlanda que ha visto cómo sus valoraciones entre los usuarios se han desplomado durante los últimos años.
Por detrás se encuentran otras dos 'low cost', como son Wizzair, con 62 puntos, y Ryanair, con 65. En este caso, se ven lastradas por la baja puntualidad, especialmente en el caso de Wizzair, que afecta al 23% de sus pasajeros. En el caso de la española Vueling, también cuenta comuna valoración baja, por problemas con el equipaje y baja satisfacción con la puntualidad de sus vuelos.
Los problemas que más afectan a los viajeros
La encuesta también señala que 1 de cada 4 vuelos cuenta con algún tipo de problema. El más frecuente son los retrasos en llegadas, que superan los 15 minutos y afectaron a un 19% de los vuelos realizados por los encuestados. Posteriormente, la cancelación del vuelo, con reubicaciones posteriores, que afectó al 4%. El equipaje es el tercer problema, que afecta al 2%, así como otro 2% que lo recogió de la cinta con daños.
Estos problemas se suman a otros fallos que los viajeros han visto a lo largo de sus viajes, como el overbooking o la denegación de las tarjetas de embarque, a los que se suma la pérdida de un vuelo de conexión como consecuencia de un retraso en la llegada.
Además, también se distingue la frecuencia con que se reclaman determinados problemas. Una complicación relacionada con el equipaje afectó al 59% de los afectados y una cancelación de vuelo, al 56%. Solo el 30% de quienes sufrieron la denegación del embarque y el 20% de quienes sufrieron retrasos se vieron en estas situaciones.
"Lo más preocupantes es que la mayoría de las reclamaciones presentadas no prosperaron, perdiendo así el pasajero una posible indemnización", ha denunciado la OCU. Por este motivo, muchos usuarios se ven obligados a recurrir en los juzgados, colapsándolo sin controversia jurídica.
El organismo recuerda que las indemnizaciones por pérdida de equipaje pueden alcanzar los 1.414 euros, mientras que un retraso por el importe puede ascender a 600 euros, lo mismo que por la cancelación del vuelo o denegación de embarque, así como un nuevo billete.
