Uno de los aperitivos más demandados por todos los consumidores, ya sea para picar entre horas o compartir con nuestros seres queridos en una reunión informal es, sin duda, las patatas fritas. Son crujientes, generalmente saladas y gustan a la mayoría.
En la mayoría de supermercados podemos encontrar una amplia variedad de surtidos, pero no todas las patatas fritas tienen la misma calidad. La realidad es que hay diferencia entre marcas y, para ser conscientes de cuáles son las mejores, la Organización de Consumidores y Usuarios (OCU) ha elaborado un estudio en el que destaca cuáles son las mejores.
1 Patatas Fritas El Gallo
La OCU destaca las Patatas Fritas El Gallo, una marca que lleva en el mercado desde la década de 1980, que cuentan con un corte tirando a grueso y son crujientes. Su bolsa tiene un peso de 350 gramos y están fritas en aceite de girasol.
2 Patatas Fritas Espinaler
Esta marca lleva en venta desde 1986 y se elabora en Vilassar de Mar (Barcelona). Sus patatas proceden de Soria y están fritas en aceite de oliva, a las que se añade sal. Son crujientes, de corte grueso.
3 Patatas Fritas San Nicasio
Esta marca cordobesa cuenta con cientos de premios. Están elaboradas a partir de patata agria seleccionada y frita en aceite de oliva virgen extra de Priego de Córdoba, con sal rosa del Himalaya.
4 Patatas Fritas Perdi
Las Patatas Fritas Perdi proceden de la localidad onubense de Aracena y están fritas en una mezcla de aceite de oliva y girasol.
5 Patatas Fritas El Valle
Estas patatas fritas están elaboradas en la localidad alicantina de Villena. Se fríen en aceite de girasol y destacan por su alto grado de crujiente. Son perfectas para disfrutar con un buen aperitivo o vermut.
6 Patatas Fritas Rubio
Se trata de unas patatas extragruesas elaboradas en Murcia, sobre las que se pueden situar canapés, como por ejemplo mejillones o matrimonios de anchoa y boquerón, también disfrutar de ellas solas. Se pueden disfrutar con un buen vermut.
7 Patatas Fritas Añavieja
Estas patatas fritas están elaboradas en Soria, de forma artesanal y se fríen en aceite de oliva para lograr que su sabor se vea realzado.