Las Navidades todavía no se han acabado y, ahora, se avecina el día de Reyes. Los preparativos para esta jornada tan mágica se aceleran, ya que el 6 de enero tiene que estar todo organizado, con una de las grandes prioridades: el roscón.
Si optas por comprarlo y por las grandes superficies, la Organización de Consumidores y Usuarios (OCU) ha analizado cuál es la firma que vende esta categoría de dulces navideños durante esta temporada.
El ranking incluye todas las opciones disponibles que actualmente se pueden encontrar a la venta en los supermercados, cuya calidad fue evaluada por un grupo de expertos pasteleros atendiendo a parámetros como el precio, etiquetado, aroma o el sabor.
El mejor roscón de Reyes del supermercado
El roscón de Reyes de El Corte Inglés Selection es el mejor valorado de todos, con un precio de 17 €/kg). La OCU señala que ha sido el mejor valorado en la prueba de degustación, especialmente por el aroma a cítricos de su masa y la calidad de los lácteos de su nata. Además, destaca que está bien decorado, con guindas y naranja y con almendras y azúcar en su justa medida.
La OCU también ha destacado el roscón con nata La Cestera de Lidl. En este caso, se trata de un producto con un coste de 7,99 euros por kilogramo. El organismo destaca en su análisis que tiene una buena decoración y su fruta variada.
El único roscón que no tiene nata de verdad
La OCU también destaca en su análisis el empleo habitual de auténtica nata en el relleno, una práctica que se ha ido extendiendo entre los fabricantes y que anteriormente no eran tan común.
Sin embargo, hay un supermercado que todavía no la emplea. Se trata de Mercadona. Para la OCU, este hecho demuestra una mejora general de la calidad del dulce, ya que hace diez años, cuando la organización comenzó a analizar rellenos, denunciaron un uso generalizado de mezclas de grasas de palma, girasol, coco o palmaste, más baratas, para sustituir a la nata.
A la hora de elegir un roscón relleno de nata en el supermercado, la OCU recomienda comprobar en el etiquetado la ausencia de grasas vegetales, priorizando aquellos cuyos relleno exclusivamente está compuesto de nata montada.