Hace un par de meses mi hermano me preguntó que por qué tenía tan mala cara y le dije que porque tenía la regla y me dolía muchísimo la tripa. Me llamó exagerada y me dijo que "eso" no debía de doler tanto. Le pregunté si alguna vez había tenido un cólico nefrítico y me dijo que sí y que ni en broma la menstruación podía doler igual a aquello. Al rato vomité y estuve muy mareada. Pero no, para él no era para tanto.
Al igual que mi hermano, mucha gente piensa que somos unas exageradas cuando decimos que nos duelen mucho los ovarios o incluso la espalda cuando tenemos la regla. Piensan que con un simple ibuprofeno o paracetamol se nos va a curar de golpe. Seguro que si eres mujer y estas leyendo esto te habrás visto en la situación de tener que explicarle a un hombre cómo es el dolor de la regla y te habrán llamado exagerada. Y claro, lo que no saben es que 1 de cada 5 mujeres sufre dolores menstruales tan fuertes que llegan a interferir en su vida diaria.
Sin embargo, ahora el profesor de salud reproductiva del University College London, John Guillebaud, aseguró en una entrevista para Quartz que en su experiencia como médico ha aprendido de sus pacientes que el dolor que provoca la menstruación puede ser casi tan doloroso como un ataque al corazón.
Tema tabú
La endiometriosisy ladismenorrea son las causas principales del dolor menstrual. La endiometriosis afecta a 1 de cada 10 mujeres que menstrúan y tiene lugar cuando las células endiometriales crecen fuera del útero. ¿Y qué nos pasa cuando sucede? Pues que tenemos fatiga, dolor y problemas de vejiga, que incluso pueden llegar a desencadenar en problemas de infertilidad.
Aunque es un problema palpable, suele llevar unos siete años diagnosticar a una mujer con endiometriosis. En nuestro país esta enfermedad es de las más dolorosas pero de las pocas por las que no se concede el derecho a baja laboral.
A todo esto hay que sumar que es tabú hablar de la menstruación y que por tanto estas enfermedades casi no se estudian. Según la investigadora Annalise Weckesser el hecho de que no se hable con normalidad del tema "ha influenciado en que la condición haya sido negada por la comunidad médica, y que incluso se haya descrito como histeria femenina".
