Siempre se dice que estos nuevos smartphones que nos hacen más sencillo el día a día desde hace años son la herramienta perfecta si la sabes utilizar. Pero, hay ocasiones en las que igual esto puede volverse en tu contra y arruinarte tu carrera profesional, algo que le ha ocurrido a este médico valenciano tras haber utilizado de la manera que no debía WhatsApp. Hay que tener mucho cuidado.
Este 'exmédico' -podríamos decir, al menos laboralmente- se dedicó a mantener relaciones sexuales en los baños de las clínicas. Escenas de sexo ecplícito que fueron grabadas por su propio teléfono móvil y muy inteligentemente -hay que utlizar la ironía en esto casos- difundida a través del teléfono móvil y de la aplicación de mensajería instantánea. Una acción que le hizo irse del Hospital en el que trabajaba y además, perjudicar a amigas y compañeras que por el efecto rebote quedaron señaladas.
¿Despecho o diversión?
Estos vídoes ya se han vuelto virales y han generado un gran revuelo y controversia entre sus compañeros del sector. Concretamente, sus compañeros cirujanos maxilofaciales, que en una semana recibieron hasta tres vídeos y numerosas fotografías. Todo fue una noche en la que el protagonista se dedicó a difundir todo esto a varios contactos de su agenda.
La mayor parte de las personas que recibieron dicho material multimedia eran mujeres. De hecho este acto no descarta en las investigaciones que pueda tratarse de una venganza por despecho amoroso que ha acabado en manos de la justicia.
Ahora las investigaciones se han centrado en averiguar como han salido los vídeos del teléfono del médico, que ha denunciado el caso y ha negado rotundamente que todo fuese cosa suya y ha afirmado que no tene nada que ver con la difusión. Pero, claro, los hechos están grabados.