A estas alturas deberíamos saber ya que los trolls de Internet son capaces de desviar cualquier tipo de iniciativa hacia el resultado más inesperado. Consiguieron llevar a Rodolfo Chikilicuatre a Eurovisión, casi logran nombrar 'Rocinante' a un buque británico y ahora han puesto sus miras en McDonald's. La cadena de comida rápida puso en marcha hace unos días una campaña en Nueva Zelanda para idear una nueva hamburguesa a cambio de patatas fritas y un refresco sin sospechar que se acabaría convirtiendo en una galería que iba desde las bromas sexuales y las propuestas absurdas hasta sugerencias cargadas de racismo y conflictos políticos.
El objetivo era promocionar Create Your Taste, una nueva manera de crear la hamburguesa a tu gusto que ya está puesta en marcha en varios países, pero tanto se les fue de las manos que han acabado por cancelar la campaña y ahora la web de la misma redirige a la homepage de McDonald's Nueva Zelanda.
Pudiendo seleccionar los ingredientes uno a uno, al principio los usuarios se limitaron a enviar hamburguesas absolutamente ridículas.
Y les ponían nombres como 'Bolsa de lechuga' o 'El carbohidrator'.
Poco a poco, la gente se fue poniendo más escatológica y dejó fluir su mente más sucia.
Como una pila de carne bautizada con algo así como 'pene gordo'...
...o la 'Sorpresa cremosa de Ron'.
Por no hablar del 'Sándwich Chochito'.
¿Os hemos enseñado ya la hamburguesa que imita un prolapso rectal?
De repente, las bromas empezaron a volverse algo serio.
Las pullas culturales comenzaron a tomar protagonismo, como la hamburguesa 'El europeo triste', con una sola loncha de queso, en plan sano.
O 'El europeo más triste'.
Tampoco tardaron las referencias políticas, como el 'Festín socialista de Bernie', el principal contrincante de Hillary Clinton, conocido por sus medidas de izquierdas.
Sin embargo, las propuestas que empezaron a preocupar a McDonald's fueron algunas realmente crueles.
'Mi Lucha', en referencia al manifiesto de Hitler.
'Niñito en una bolsa para cadáveres'.
'Mezquita en la Zona Cero'.
Así pues, McDonald's decidió poner fin a la campaña. Y aunque entendemos por qué, no podemos dejar de lamentarnos por pérdidas como las siguientes hamburguesas.
'El privilegio de los delgados', que también viene a meter el dedo en la llaga del debate sobre la discriminación que sufren las personas con sobrepeso (fatphobia o gordofobia, en español).
O la que imitaba a Pepe The Frog.
O todas las demás propuestas que aparecen ahora en la página australiana, aunque ya no se les pueda poner nombres ingeniosos.
Esperemos que McDonald's obedezca a sus usuarios y nos satisfaga con alguna de estas hamburguesas.