La pesadilla que vivieron los hijos del matrimonio Turpin ha terminado con su confesión. Louise Ann Turpin, de 50 años, y David Allen Turpin, de 57, se han declarado culpables de 14 de los 49 cargos que afrontaban, entre los que se incluyen delitos de tortura, maltrato infantil, y crueldad.
El caso se destapó después de que una de las hijas, de 17 años, lograra escaparse por una ventana y llamara a la policía para avisar de que sus hermanas estaban "encadenadas en camas" en el domicilio familiar ubicado en el sur de California. Cuando la preguntaron donde estaba exactamente, dijo: "No lo sé, nunca he salido a la calle".
Tras la declaración de la menor, las autoridades acudieron a la casa del matrimonio donde encontraron un olor nauseabundo y a varios de los niños atados a las camas, tal y como relató la menor. En pocas horas comenzaron a conocerse los detalles del infierno vivido por los niños: vivían de noche, tenían prohibido salir de casa, les sometían a castigos físicos constantes y pasaban hambre.
25 años de cárcel para el matrimonio
La pareja se enfrenta ahora a 25 años de cárcel. La Fiscalía ha reconocido que el principal incentivo para aceptar un acuerdo de culpabilidad era evitar que los niños tuvieran que declarar en el juicio. El fiscal de Riverside, Mike Hestrin ha explicado su decisión en una rueda de prensa: "Queremos justicia, pero de justicia también es cuidar de las víctimas y no queremos que sufran más".
El fiscal ha aclarado además que"la condena es la más grande que se pueda lograr en California" después de que entrara en vigencia el año pasado una ley que prohíbe condenas superiores a 25 años a personas de la tercera edad. Los 13 hijos de la pareja se encuentran ahora a cargo de los servicios sociales del Condado de Riverside. El próximo día 19 de abril se decidirá la sentencia definitiva para el matrimonio Turpin.
