El matrimonio formado por la diseñadora Sabrina Kouider, de 35 años, y el banquero Ouissem Medouni fue declarado culpable el pasado jueves 23 de mayo de haber asesinado a Sophie Lionnet, su 'au pair' de 21 años que vivía con ellos en su casa de Londres, en el barrio de Southfields.
El jurado consideró probado que mataron a la niñera y quemaron su cuerpo en el jardin de la casa. Lionnet llegó a Reino Unido en 2016 procedente de Francia para mejorar su nivel de inglés y cuidaba de los dos hijos de la pareja que la asesinó. La noticia la hemos conocido esta semana por la celebración del juicio, pero Sabrina Kouider y Ouissem Medouni mataron a su niñera en septiembre de 2017.
Lionnet fue sometida a ahogamientos, no le daban de comer y le rompieron varias costillas porque estaban seguros de que esta salía con un antiguo novio de Kouider, el cantante Mark Walton, y le dejaba entrar a su casa para que drogase a los niños. Nada de esto ha sido demostrado, sin embargo, las torturas fueron grabadas por ellos mismos.
Obsesión con el músico
Durante el juicio se conoció que el matrimonio estaba obsesionado con el músico y que Kouider le había denunciado en treinta ocasiones por haber alquilado un helicóptero para espiarla y haberle realizado magia negra. Estos estaban convencidos de que Lionnet salía con Walton y que le dejaba pasar a su casa para drogar a sus dos hijos y abusar sexualmente de ellos.
Walton quiso enviar un comunicado en el que expresa que se ha visto afectado "emocional y profesionalmente" por el caso y contó que ha facilitado a la policía inglesa el acceso a todas sus cuentas de email, redes sociales e incluso su teléfono móvil para que quede claro que no conoció a la niñera.
Barbacoa para ocultar el olor del cádaver
El diario de 'The Sun' informó que existen fotografías, en las que se verían restos de las gafas de Lionnet, que demuestran que el matrimonio realizó una barbacoa para disimular el olor del cadáver, que quemaron en el jardín.
Asimismo, la prensa británica afirma que quien más maltrataba a la niñera francesa era Ouissem. Y es que la pareja de asesinos sometía a su empleada a interrogatorios en los que la torturaban para que "confesase" su relación con el cantante Walton. En uno de los vídeos que grabaron en una de las sesiones en las que interrogaban a la joven, el hombre le gritaba "No mientas, monstruo".
Sabrina Kouider y Ouissem Medouni recibirán la sentencia del tribunal británico el próximo 26 de junio.
