Alexey Glushchak, de 31 años, era un espía de la agencia de inteligencia militar rusa GRU. Su participación en la invasión de Ucrania por orden de Putin le ha costado la vida, en la batalla de Mariúpol, al sur del país, donde según las autoridades locales ya han fallecido casi 2.500 personas por los bombardeos rusos. Glushchak se suma así a la amplia lista de militares y miembros del alto mando ruso que están pereciendo en esta ofensiva militar contra Ucrania y que están generando cierta contestación interna que el Kremlin reprime con puño de hierro.
"Debido al estricto secreto de la operación militar, las circunstancias de la muerte del héroe de Tyumen no se revelan", ha comentado el Kremlin. Glushchak fue enterrado en Rusia siguiendo todos los honores militares posibles. "Hoy nos despedimos de mi amigo de la infancia Alexey Glushchak, quien murió trágicamente el 8 de marzo en Ucrania en el cumplimiento de su deber. Conozco bien a su familia: éramos vecinos, vivíamos en el pueblo de Alexandrovka, distrito de Sladkovsky. A menudo pasaban tiempo juntos en el patio. Alexei siempre ha sido activo y amigable", dijo su amiga de la infancia Marina Chagina al canal 72.RU.
Captain Alexey Glushchak, 31, killed fighting near Mariupol, Russia has said
— Daily Mail Online (@MailOnline) March 14, 2022
It is the first time Moscow has acknowledged losing a GRU intelligence officer
+ Two intelligence officers for Russian paratrooper forces also known to have died
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Las autoridades rusas han reconocido, en el último parte del conflicto, casi 500 militares muertos en la guerra de Ucrania. Por su parte, el Gobierno ucraniano de Volodímir Zelenski aumenta drásticamente esa cifra hasta casi los 12.000 soldados enemigos. Las estimaciones europeas y estadounidenses se encuentran en cifras más modestas, entre los 2.000 y los 6.000.
La primera vez que la GRU admite la muerte de uno de sus miembros
Se trata de la primera ocasión en la que la tenida GRU, creada en 1918 tras la Revolución Bolchevique y siempre bajo la tutela del Ministerio de Defensa de Rusia, admite públicamente la muerte de uno de sus oficiales. El día en el que murió Glushchak había hablado con su esposa y su madre para felicitarlas por el Día Internacional de la Mujer. Sin embargo, ese mismo día se enteró de que su hijo había sido abatido en la guerra en una operación cuyos detalles no han transcendido.
No es el único cargo abatido en la invasión a Ucrania. Entre ellos, se encuentran Georgy Dudorov, subcomandante de la compañía de reconocimiento del 137º regimiento de la 106º División Aerotransportada de la Guardia de Tula y Aleksey Aleshko, graduado de la prestigiosa Escuela Superior Aerotransportada de Guardas de Ryazan.
También ha transcendido la muerte de Andrei Zakharov, muerto en una emboscada. Previamente murieron los generales Vitaly Gerasimov, de 45 años y Andrei Sukhovetsky, de 47 años, subcomandante del 41º Ejército de Armas Combinadas del Distrito Militar Central. También cabe destacar la muerte de Magomed Tushayev, el general checheno próximo al presidente de la república federada rusa, Ramzán Kadyrov, y perpetrador del genocidio contra la comunidad LGTBI en Chechenia.