Cada persona es un mundo. Por eso, no es difícil encontrar a gente que ha tenido muchas experiencias sexuales o gente que no ha tenido todavía ninguna, sobre todo si hablamos de adolescentes o de jóvenes. Sea como sea, a nuestra potencial pareja podría no gustarle que hayamos tenido muchísima experiencia o que todavía no nos hayamos estrenado.
Ya lo decía Aristóteles, la virtud está en el punto medio. Pero, cuando hablamos de sexo, ¿cuál es el punto medio? Bueno, eso depende. Las mujeres tienden a afirmar que han mantenido relaciones sexuales con menos personas, porque no cuentan esa experiencia a no ser que haya sido completa. En el caso de los chicos, es todo lo contrario. Ellos tratan de "inflar" un poco sus encuentros sexuales, contando a veces de más.
"Demasiada" experiencia
En un estudio recogido por Psychology Today, los investigadores han encontrado un cierto prejuicio contra las personas que han tenido más parejas sexuales. Solemos encontrarlas como buenas candidatas para tener una relación casual, pero no para una relación a largo plazo.
Al contrario de lo que se pueda creer, los hombres con mucha experiencia suelen ser valorados igual de mal que las mujeres con mucha experiencia. Un estudio reciente investigó la disposición de las personas a la hora de considerar a alguien como una posible pareja. El hecho de haber tenido más o menos experiencias sexuales fue uno de los factores clave.
El punto medio
Los participantes del estudio valoraron negativamente a aquellas personas que no habían tenido ninguna pareja sexual o solo habían tenido una o dos. Sin embargo, también valoraron negativamente a aquellas que habían tenido muchas experiencias previas. Para la mayoría, la cantidad óptima de relaciones previas debía rondar entre dos o tres.
Esta investigación se llevó a cabo en adultos jóvenes que tenían alrededor de veinte años. Los jóvenes de hoy en día comienzan las relaciones sexuales muchísimo más tarde de lo que lo hicieron sus padres y de manera mucho menos frecuente, por lo que es lógico pensar que, para ellos, el número de parejas sexuales óptimo sea dos o tres.
Del mismo modo, existe un estigma hacia las personas que no han tenido ninguna experiencia sexual previa. En una encuesta hecha en Estados Unidos a adultos solteros se vio que era poco probable que los participantes quisieran salir con alguien que todavía era "virgen".