La justicia de Reino Unido ha condenado a cadena perpetua a Marius Gustavson, un ciudadano noruego de 46 años residente en el país que ha admitido la castración y mutilación de varios hombres, que derivaban en casos de canibalismo y que grababa en todo momento para su posterior difusión en una página web pornográficas de pago que había creado específicamente, www.eunuchmaker.com (creador de eunucos).
Por estos hechos, un tribunal le ha condenado a cadena perpetua, aunque tendrá que cumplir un mínimo de 22 años de prisión antes de que las autoridades en prisión puedan determinar medidas alternativas que podrían incluir su liberación, como dicta la sentencia emitida por el tribunal penal de Old Bailey (Londres).
La fiscal del caso, Caroline Carberry, ha añadido durante el juicio que también existen pruebas de que el acusado también vendía en internet las partes del cuerpo mutiladas, previamente congeladas, y que practicaba "canibalismo", puesto que en un vídeo aparece cocinando unos testículos que después comió en una ensalada.
Gustavson admitió los delitos que le imputó la justicia. En concreto, cinco cargos de agresión física con premeditación, a los que se suman la elaboración y distribución de imágenes ofensivas y pornográficas de un menor; además de posesión de pornografía extrema.
En la causa también se ha condenado a otros seis cómplices, que cumplirán penas entre 4 y 12 años de cárcel, a los que se suman otras dos personas procesadas el pasado mes de enero, tras su detención inicial en una operación conjunta entre las policías de Londres, Escocia y el sur de Gales.
100 euros anuales para ver sus vídeos
Gustavson había creado página web específica donde difundía todos los vídeos con sus crímenes, www.eunuchmaker.com, en la que contaba con 22.841 clientes en todo el mundo, que pagaban alrededor de 100 libras (116 euros) anualmente para visualizar contenidos como la castración de hombres, congelación de miembros y cómo comía los genitales extirpados en platos como ensaladas.
El acusado se aprovechaba de la situación de vulnerabilidad de muchos hombres, a los que prometía ingentes ingresos por los vídeos, unos contenidos por los que el acusado habría obtenido alrededor de 300.000 libras (casi 35.000 euros) entre 2017 y 2021.
Las mutilaciones que perpetraba el condenado se realizaban en hoteles y pisos alquilados en Londres, en las que contaba con la ayuda de personas sin ninguna calificación médica. En total, participaron en este papel, al menos, 13 hombres, uno de ellos de 16 años.
Dada la falta de cualificación de las personas que participaban, el sadismo de las prácticas y las condiciones en las que se realizaban, en algunas ocasiones sufrieron graves heridas que llevaron a llamar a los servicios de emergencias, donde el acusado mentía sobre el origen de las heridas.
El acusado también pidió en 2017 a uno de sus seguidores, Damien Byrnes, que fue condenado en enero, que le cortara el pene, que fue encontrado cuatro años después en el cajón de su casa. Además, los documentos de la causa también recogen que le pidió amputar una pierna y un pezón.
"Sentimientos de empoderamiento"
Los argumentos del abogado, Rashvinderjeet Panesar, son que el acusado desarrollaba estas prácticas y que decidió finalmente poner en marcha la página web porque experimentaba "sentimientos de empoderamiento y una mayor aceptación de sí mismo".
El letrado alegó que su cliente había iniciado estas prácticas tras la ruptura de su matrimonio en 2016 y que buscaba a personas que también experimentaran placer con este tipo de prácticas.
Gustavson fue detenido en 2020 después de que una persona interpusiera una denuncia contra él, donde proporcionó todo tipo de pruebas ante la policía, incluyendo vídeos, fotos y mensajes. Durante la denuncia explicó que estaba drogado, cuando el sujeto le interpeló, después lesionó y finalmente ató e incluso electrocutó.