Hasta hace tres días muy pocos sabían quién era María Elósegui, catedrática de Filosofía del Derecho de la Universidad de Zaragoza. Sin embargo, tras ser elegida como representante española en el Tribunal Europeo de Derechos Humanos (TEDH) la jurista no deja de aparecer en los medios y no sólo por ser la primera mujer española en conseguirlo, también por sus ideas conservadoras.
Y es que según publicó eldiario.es, Elósegui es homófoba y tranfóbica. En una entrevista que concedió al portal vinculado al Opus Dei, almudi.org, aseguró que la homosexualidad es una patología y que las personas homosexuales deciden serlo."Quienes construyan y realicen su comportamiento sexual de acuerdo a su sexo biológico desarrollarán una conducta equilibrada y sana, y quienes se empeñen en ir contra su biología desarrollarán distintas patologías. Eso está claro", afirmaba.
En dicha entrevista también fue preguntada por el matrimonio homosexual y su respuesta dejó clara su postura. Dijo que el derecho civil había sido invadido por la "ideología liberal de género" y que eso explicaba "las corrientes recientes de intentar equiparar jurídicamente las relaciones homosexuales a las heterosexuales".
Insistía en que ningún ordenamiento jurídico europeo reconocía la unión entre personas del mismo sexo como relaciones matrimoniales y lo hacía con cierto desprecio: "Pero a pesar de todo, ningún ordenamiento jurídico europeo ha llamado a esas relaciones matrimonio, aunque les intente otorgar cierta protección jurídica que yo también considero justa dentro de ciertos límites".
Elósegui se reafirma en sus declaraciones
Ahora la juez ha concedido al diario El País una pequeña entrevista en donde ha sido preguntada por la homosexualidad, la transexualidad, el feminismo, sus creencias religiosas y sobre el TEDH. Sus respuestas no son concisas pero se intuye que sus ideales no son nada acordes al siglo XXI.
Al ser preguntada sobre si la homosexualidad es una patología, Elósegui dice que cree que no lo es, pero que existen varias teorías que están en proceso de investigación para aclarar el origen de esta orientación sexual, que vuleve a calificar como "elección más". Además se niega a responder si está a favor o en contra del matrimonio entre personas del mismo sexo. "No voy a contestar. No voy a dar una respuesta blanco o negro. Como juez tengo que respetar la legislación. Yo no estoy de acuerdo con el activismo judicial y he criticado sentencias por eso", justificaba.
Considera que aunque no todos pensemos igual, como juez debe aplicar la ley guste o no y que por tanto no cabe lugar a interpretaciones: "Hay unos márgenes de interpretación pero también en la norma hay unos núcleos duros que no dejan lugar a dudas. El juez no puede tergiversar una normativa para aplicarla en una línea a favor de opiniones personales. No debe de hacer activismo judicial", explicaba a El País.
¿Orquestó una campaña para ser elegida?
Desde eldiario.es también se insunuó que la elección de Elósegui como miembro del TEDH fue fruto de "una intensa campaña, sin precedentes en el Consejo de Europa", que incluyó "el envío masivo de mensajes por parte de la candidata a los parlamentarios hasta horas antes de la votación y en los que intentaba desacreditar a su principal oponente".
Era la candidata que partía con menos posibilidades. Se enfrentaba a José Martín y Pérez de Nanclares, director general de Asuntos Jurídicos del Ministerio de Asuntos Exteriores, es decir, era candidato del Gobierno y fue propuesto como miembro del tribunal por la comisión especializada de la Asamblea Parlamentaria del Consejo de Europa.
Y en su entrevista con El País ha desmentido que esto haya ocurrido afirmando que ha sido elegida por su currículum, ya que tiene mayor experiencia que los hombres contra los que compite. "He llegado a los mismos sitios, no sólo con igualdad, sino con el doble de currículum en general".
Además trata de dejar claro que no conoce cuál ha sido el proceso de designación y que ha sigo la elegida por mérito propio: "No me presentaba en igualdad de condiciones por el tema de influencias, pero en la asamblea parlamentaria ya me conocen. He estado trabajando allí y las cosas se demuestran trabajando. Los juristas me han visto trabajar. Han leído el curriculum y no se han dejado llevar de clichés o estereotipos", explicaba.
