La alcaldesa de Madrid, Manuela Carmena, continúa reduciendo la importante deuda heredada de la época de Alberto Ruiz Gallardón al frente del Consistorio. El montante, que alcanzó máximos en 2011 (llegó a superar la suma de todos los ayuntamientos españoles juntos) ahora se encuentra en los 3.274 euros, el nivel más bajo desde el tercer trimestre de 2005.
Con estos datos, la deuda de la ciudad ha descendido un 42% desde la llegada de Carmena, lo que se traduce en 2.363 millones menos para las arcas municipales desde la llegada a Cibeles, cunado se situaba en más de 5.000 millones.
Según los datos recogidos por el Banco de España, entre abril y junio de 2018 el endeudamiento se redujo en cerca de 100 millones de euros, acumulando un descenso de 150 millones con respecto al cierre del año pasado.
La época en la que se registró el nivel actual se enmarca en el tercer trimestre de 2005. En tan sólo un año, con Gallardón al frente del Consistorio, esa deuda aumentó hasta los 5.040 millones y alcanzaría su máximo en 2012, con 7.733 millones.
El endeudamiento de la administración continúa creciendo
Al contrario de lo que sucede en la capital, el conjunto de las administraciones españolas ha visto cómo su deuda aumentaba hasta los 1,163.000 millones de euros, lo que supone un aumento del 0,27% respecto al año pasado.
España debe en total el 98,1% de su PIB, según indica el Banco de España, una deuda aún considerable para las arcas públicas, aunque se recuperan tras las amenazas de rescate que recibió el país ibérico durante los peores años de la crisis.
La lucha contra el endeudamiento de las administraciones es fundamental para que nuestro país vuelva a mostrar una imagen de solidez financiera. En caso contrario, se antojaría más difícil encontrar proveedores para servicios públicos básicos y con condiciones ventajosas.