El sonido de las campanas resonando desde la Catedral de Barcelona se refleja en las paredes de los edificios que rodean la Plaça del Rei, en el corazón del barrio gótico. En un triángulo invertido se congregaron este lunes 26 de febrero destacadas figuras como los periodistas Andreu Buenafuente y Jordi Évole, el actor Carlos Bardem y la actriz Ariadna Gil, y músicos como Joan Dausà, Santi Balmes, Nacho Vegas y Fermín Muguruza, junto a otras personalidades y representantes sindicales.
Su propósito fue respaldar el manifiesto 'Protestar no es terrorismo', el cual critica las investigaciones llevadas a cabo por la Audiencia Nacional contra Tsunami Democràtic. Esta iniciativa busca desmontar la equiparación entre los movimientos sociales de protesta y el terrorismo, y reivindica el derecho a manifestarse y movilizarse como prerrogativas inalienables en una sociedad democrática.
El manifiesto ha obtenido el respaldo de más de 150 entidades, incluyendo destacadas organizaciones como Òmnium Cultural y la Asamblea Nacional Catalana, así como figuras prominentes en la cultura y el periodismo como Mònica Terribas, Gemma García y Jordi Basté, además de ciudadanos que lo suscriben a título individual.
El manifiesto
"En los últimos años se ha visto cómo la justicia ha criminalizado la protesta, creando repercusiones para quienes ejercían el derecho de reunión y vulnerando la libertad de expresión", ha comenzado la periodista Ana Polo, primera encargada de la lectura del manifiesto.
El texto se entiende en clave de la investigación de la Audiencia Nacional contra la organización de Tsunami Democràtic y señala que el proceso solo tiene como objetivo "criminalizar la protesta, limitar los derechos fundamentales y silenciar la disidencia política".
Meras estrategias
Según esta iniciativa, los movimientos políticos y los procedimientos llevados a cabo por la Audiencia Nacional y el Tribunal Supremo para investigar el Tsunami Democràtic se perciben como meras estrategias destinadas a erosionar la credibilidad del Gobierno central y entorpecer la actividad parlamentaria. Esto adquiere relevancia en un momento crucial, ya que el Gobierno se encuentra en la fase final de las negociaciones sobre la Ley de Amnistía.
Los participantes enfatizan que la investigación dirigida por el juez Manuel García-Castellón constituye una intromisión del poder judicial en el ámbito legislativo. Por lo tanto, demandan la adopción de medidas que impidan que la justicia sea utilizada como un instrumento de persecución política y solicitan la retirada de los cargos de terrorismo contra aquellos involucrados en las protestas contra la sentencia del procés.
Organizaciones y personalidades políticas
Entre las personalidades presentes en el acto estaban el líder de CC.OO. de Catalunya, Javier Pacheco, y el de UGT de Catalunya, Camil Ros; el presidente de Òmnium Cultural, Xavier Antich, y la presidenta de la Assemblea Nacional Catalana, ANC, Dolors Feliu.
Además, el manifiesto también lo han firmado CC.OO de Catalunya, UGT de Catalunya, CGT de Catalunya, la Intersindical Alternativa de Catalunya, IAC, la Intersindical-CSC, Unió de Pagesos, Unió Sindical Obrera de Catalunya, USOC, USTEC·STEs, el Consell Nacional de la Juventut de Catalunya, la Associació d'Actors i Directors Professionals de Catalunya, la Confederació d'Associacions Veïnals de Catalunya y la de Cooperatives de Catalunya.