Una "manada" de humanos que se identifican como perros han reclamado su derecho a ser reconocidos como tales en una protesta en Berlín. Las imágenes de la manifestación ya se han hecho virales por redes sociales.
El encuentro tuvo lugar en la estación de ferrocarril de Potsamer Platz de la capital de Alemania, donde los participantes solo se comunicaban a través de ladridos y aullidos. Las imágenes han ganado una gran repercusión por redes sociales, donde se ha generado una gran controversia.
"Simplemente abandónelos en la tundra siberiana y déjelos sobrevivir con sus instintos caninos" o"llame al control de animales y dénles sus dosis contra la rabia", han sido algunos de los comentarios más escépticos que han podido leerse.
Un fenómeno cada vez con más adeptos
Esta expansión del fenómeno transespecie ocurre justo después de la viralización de Toco, el japonés que se compró un disfraz ultra realista de border collie por 14.600 euros, para empezar a vivir como uno de estos animales. En una entrevista para The New York Post, Toco expresó su entusiasmo por conocer a otras personas con su mismo entusiasmo por vivir una vida canina. "Creo que sería fantástico si existiera algo como esto", dijo.
Los psicólogos han querido destacar la diferencia entre "therians", que son personas que "se identifican como una criatura distinta a la humana" y "furries", que son individuos que se disfrazan de animales solo como un fetiche.
Tom Peters es un británico que reveló su identidad como dálmata, y Toru Ueda es un ingeniero de Tokio que invirtió 23.000 dólares en un traje personalizado. "Cuando uso mi disfraz, siento que ya no soy humano. Estoy libre de relaciones humanas. Todo tipo de problemas, relacionados con el trabajo y otras cosas, puedo olvidarme de ellos", declara Ueda.
