Difícil es de olvidar la actuación de Madonna en los Brit Awards de 2015. Y no precisamente por la brillantez musical de 'Living of love', sino por el galletazo que se metió cuando uno de sus bailarines tiró de la capa antes de que a ella le hubiese dado tiempo a desabrochársela y acabó tirada por los suelos, precipitándose de espaldas desde lo alto de unos escalones.
Cualquiera podría pensar que la Reina del Pop jamás se atrevería a llevar a cabo una hazaña similar sobre un escenario en lo que le queda de carrera (que puede ser mucho, porque a sus 57 años parece incombustible). Pero no, nos equivocábamos.
Madonna lo ha vuelto a hacer.
Si todavía sigue lanzando temazos de diva adolescente, ¿por qué iba a dejar de ponerse capas en un escenario?
Esta vez ha ocurrido en Bangkok, capital de Tailandia.
Fue este 10 de febrero, durante la actuación de 'Material girl'. Madonna eligió una puesta en escena solemne en la que caminaba con un ramo de flores en las manos, cubierta por un velo que sujetaban dos caballeros en esmoquin como si fuera una novia de la realeza.
Bueno, otra de las excentricidades de la artista, podríamos pensar.
Sin embargo, la actuación -de nuevo- no salió como la diva había planeado.
Llegado el momento en que los dos mozos tenían que tirar de la capa y Madonna se tenía que desprender de ella, el velo se quedó enganchado y no se deslizó sobre su cabeza.
Y no sabemos qué es más ridículo, si que se hubiese caído directamente o el tira y afloja que se produjo en ese momento entre Madonna y los caballeros.
La escena fue como la del piercing de 'La cosa más dulce'.
Madonna tiraba para un lado, los bailarines para el contrario. Su cabeza no conseguía zafarse del velo, y ella tenía las manos demasiado ocupadas en el micro y el ramo como para utilizarlas.
Y, justo cuando esperábamos que se cayera...
...Madonna consiguió salir de debajo del velo como si de un parto se tratara. Lo hizo disparada, que por poco es ahí cuando sufre la (esperada) caída. El vídeo completo del incidente podéis verlo al final del artículo.
Lo cierto es que este no es el único revuelo que Madonna levanta con una capa en su gira asiática de Rebel Heart Tour. Un tercer incidente con una bandera la colocó en el ojo del huracán en Taipei (Taiwán), donde dio un concierto el pasado 4 de febrero.
Como gesto para ganarse al público, la Reina se puso a sus espaldas la bandera de Taiwán, a modo de mantón de Manila. Y, aunque a los taiwaneses les encantó, en China levantó ampollas.
Taiwán se autogobierna desde 1949, pero en la China continental es algo que no aceptan y siguen considerando que es parte de sus territorios. De hecho, hay quien dice que la policía china le ha confiscado su guía de viaje porque esta no marcaba a la isla como parte del país.
Entre esto y sus repetidas muestras de apoyo al Tíbet, es poco probable que a Madonna se le autorice la entrada para cantar en ciudades como Pekín o Shanghái. China controla de cerca a los artistas y personalidades que solicitan el acceso al país antes de permitirles entrar, y más si va a ser encima de un escenario, donde puede lanzar mensajes que no gusten el Partido.
Precisamente la DJ Mary Mac, telonera de Madonna en el concierto, había gritado previamente "¡amo Taiwán! ¡Amo China!" ante el estupor del público.
Ay, Madonna. Quizás es momento de que vayas pensando en retirar las capas de tus actuaciones, que por unas cosas u otras no te traen más que disgustos. A ver si así consigues por fin tener la fiesta en paz.
A continuación podéis ver el vídeo completo del incidente de la capa de Bangkok: