El ex presidente de la Real Federación Española de Fútbol (RFEF), Luis Rubiales, no prevé regresar inmediatamente a España. De viaje en Punta Cana, su defensa ha comunicado a la jueza que tiene previsto regresar el próximo 6 de abril, con la Semana Santa ya concluida, y que está a "plena disposición" del juzgado.
Rubiales no pudo ser detenido ayer, miércoles 20 de marzo, porque se encontraba fuera de España. La Guardia Civil registró su domicilio en Granada y requisó diversa documentación. Además, se han efectuado registros en la sede de la Federación, la Ciudad de Fútbol de Las Rozas (Madrid), así como La Cartuja, sede de la próxima Copa del Rey, cuyas obras de remodelación se encuentran bajo sospecha.
El ex presidente de la RFEF será inmediatamente detenido en cuanto regrese de Punta Cana, puesto que se encuentra imputado en una causa que ya cuenta con siete detenidos y cinco investigados sobre posibles contratos irregulares en la Federación que se extienden durante los últimos cinco años, entre ellos, para llevar la Supercopa de España a Arabia Saudí.
Luis Rubiales no se encuentra solo en República Dominicana, sino que está en compañía del ex futbolista Francisco Javier Martín Alcaide, conocido como 'Nené', su amigo, también bajo sospecha. Ninguno de los dos ha podido ser detenido por el momento.
Negocios en Punta Cana
La presencia de Luis Rubiales en Punta Cana no representa una sorpresa para las autoridades, puesto que el ex presidente de la RFEF viaja habitualmente allí por motivos de negocios.
Rubiales estrechó lazos con empresas de República Dominicana tras su salida del fútbol. Es habitual que se desplace hasta Santo Domingo para abrir negocios, en algunos casos de manera directa con el béisbol, pero también indirectamente con el fútbol, cuando la FIFA no le permite afrontar actividades en su marco jurídico.
Rubiales se ha encontrado durante los últimos días en la zona de Cap Cana, situada a alrededor de 45 minutos de la capital. Previamente, también ha estado en Santo Domingo, en la zona de apartamentos que pertenecen a Juan José Hidalgo, presidente de Globalia y Air Europa, muy vinculado al país, del que tiene nacionalidad.
Rubiales ha estrechado tantos lazos con el país caribeño que se ha planteado incluso, según publica el diario Marca, comprar una casa allí con el objetivo de fijar su residencia o, al menos, pasar gran parte del año.
