La política del Partido Popular en materia sanitaria siempre ha ido dirigida hacia la privatización del sistema público. La Comunidad de Madrid ha sido uno de los estandartes de este modelo que, al igual que se testó en el hospital de Alzira, apuesta por construir centros en los que la gestión, médicos y servicios se encargan a una empresa privada, en detrimento de lo público.
Uno de los mayores defensores de este tipo de medidas es Javier Fernández-Lasquetty. El exconsejero de Sanidad se vio obligado a dimitir en 2014 cuando la Justicia paralizó su plan para privatizar la gestión de seis hospitales de la región. Tras un período de cinco años en Panamá y defenestrado por Rajoy y Cifuentes, ahora ha regresado como todopoderoso consejero de Hacienda del gobierno regional.
De manera paralela a este regreso, ha aterrizado en la capital uno de los mayores fondos encargados de privatizar la gestión sanitaria en el mundo. Se trata de Medical Properties Trust (MPT), un fondo que gestiona más de 6.000 millones de euros en activos sanitarios en todo el mundo con una capitalización superior a los 11.000 millones de dólares.
El gigante no oculta sus intenciones y lleva varios meses creando todo un entramado que levanta los peores temores de los profesionales sanitarios. Entre ellos, la creación en noviembre de la empresa Newco Inversiones Inmobiliarias con el objeto, según consta en el registro de "la promoción, adquisición, tenencia, explotación, ejecución y enajenación de edificaciones [...] la construcción y rehabilitación de todo tipo de bienes inmuebles; la intermediación en la compra y venta".
La matriz de esta sociedad, MPT, cita entre sus especialidades "la adquisición de hospitales" con proyectos financiados en hasta 1.000 millones. Ahora, la matriz se está encargando de inyectar dinero en la firma. El pasado mes de enero cerró dos ampliaciones de capital por más de 40 millones de euros. Además, ha situado en la cabeza a Karl Aldag Jr. Eward, que ejerce como presidente y consejero delegado de la matriz, MPT.
Abandono de los hospitales de gestión pública y mayor financiación en la privada
La llegada de Isabel Díaz Ayuso a la presidencia de la Comunidad de Madrid, en una coalición con Ciudadanos, solo ha servido para incidir en la privatización de la sanidad pública.
Solo en este año 2019, los hospitales privatizados han aumentado su presupuesto en un 19,4%; una cifra sensiblemente superior a la que se corresponde con los públicos, en los que solo se ha invertido un 6,4% más.
El deterioro de la gestión pública está siendo fundamental para que el gobierno, que es quien no aporta los recursos suficientes, justifique su apuesta por la pritavización. Y no es una política exclusiva de Madrid: este proceso se está denunciando en otras autonomías como Cataluña o Baleares.
