Un joven de 20 años ha conseguido librarse de la pena de cárcel después de haber mantenido relaciones sexuales con una menor de 12 años. La jueza ha determinado que el joven tuvo un comportamiento "inmaduro" y "posiblemente ingenuo" al creer que esta era mayor de 16 años debido a su actitud "sexualmente sugerente".
El joven, llamado Jachin Joshua Mascall, conoció a la chica a través de la aplicación para citas Tinder y viajó desde Dunstable hasta Londres para conocerla. Allí pasaron dos días conociéndose y viajando por la capital, donde mantuvieron relaciones sexuales en varios lugares de la ciudad, incluido el aparcamiento del centro comercial Westfields Stratford el pasado mes de mayo.
Después de su arresto, Macall confirmó que había tenido relaciones sexuales con la menor, que tenía 12 años, pero insistió en que realmente pensaba que tenía más de 16. De esta forma, el joven admitió tres cargos de violación a una menor de 13 años en el Tribunal de la Corona del Interior de Londres, por lo que pasó a estar bajo custodia durante siete meses y fue liberado bajo fianza el pasado mes de diciembre.
"Inmaduro y posiblemente ingenuo"
En este caso, la jueza Freya Newbery consideró que "no había ninguna evidencia" de que Mascall tuviera "tendencias pedófilas en absoluto" añadiendo que el joven pensó que la chica era mayor porque "tenía un automóvil y un lugar para vivir".
"En cambio, lo que hay es un hombre joven que es relativamente común, inmaduro y posiblemente ingenuo", sostuvo. "En otras palabras, no sabías que tenía 12 años o que tenía menos de 16. Te sorprendió descubrir que era tan joven cuando te arrestaron", añadió.
Además, las imágenes de una cámara de seguridad que captaron a los jóvenes muestran que "ella no estaba angustiada mientras estaba contigo y en un momento pareció actuar de una manera sexualmente sugerente", afirmó la juez. "Sin duda, ella misma era una niña muy vulnerable. Estaba sexualizada y activa en las redes sociales, incluido Tinder, fingiendo ser adulta. La ley existe para proteger a las personas vulnerables como ella, incluso de sí mismos", añadió.
Por lo tanto la jueza considera probado que Mascall no abusó de la chica ni utilizó la fuerza en ningún momento, pero debido a su edad ella no podía dar su consentimiento y debería haber sido el estudiante el que debería haber verificado la edad de la joven.
Así, Mascall ha sido condenado a tres años de trabajos comunitarios no remunerados y deberá pagar 450 libras esterlinas, así como 40 días de actividad de rehabilitación y 48 sesiones de un programa diseñado para fomentar la madurez.