Corren tiempos de cambio en la televisión noruega respecto a Eurovisión. Tras muchos años de buenos resultados, su Jefe de Delegación, Stig Karlsen, abandona el barco para convertirse en el responsable de comunicación de la primera mujer astronauta de la historia de Noruega. Esta edición del Melodi Grand Prix ha sido la última que ha firmado seleccionando las canciones, apostando por un festival donde seis de los nueve concurrentes ya habían estado anteriormente en liza.
Con vueltas de campanillas como las de las ganadoras de 1985 Bobbysocks, o la banda rock Wig Wam, que ya representara a Noruega en el año 2005, la victoria ha acabado cayendo para Kyle Alessandro, un chico que ya pasara hace un par de años por el formato. Con el tema 'Lighter', la peculiaridad de Kyle es que pese a ser nacido en Noruega, cuenta con familia nacida en España, y es castellanoparlante al 100%.
'Lighter' superó a una variedad de propuestas que a ojo de los fans y los streamings no causaron mucho furor en Noruega. Siendo la performance de Kyle la más rotunda y animada de la noche, le fue sencillo convencer a jurado y televoto para ganarse el billete a Basilea.
¿Qué tal es 'Lighter'?
Noruega se dividía en su Melodi Grand Prix entre la propuesta movida y bailable de Kyle Alessandro y la 'vikingada' de Nataleen, la otra gran favorita de la noche. En ese duelo, todo parece indicar que convenció más Kyle frente a una Nataleen que si bien vocalmente estuvo espectacular, no encontró escénicamente elementos para convencer al público.
No podemos decir que temas como 'Lighter' sean novedosos en Eurovisión, pero sí podemos reconocer que rara vez no funcionan. Este tipo de shows tan enérgicos siempre tienen hueco en la final, lo que quizá debe ser el primer reto a amarrar para la delegación noruega en Basilea.
En una final nacional que de partida parecía que no tenía muchas propuestas competitivas que rascar, Noruega eligió su baza más potente, prometiendo energía e intensidad para el mes de mayo.