Diversos estudios apuntan a que son muchas las mujeres incapaces de alcanzar el orgasmo, de hecho, una de cada cuatro es incapaz de llegar al clímax. Aunque en muchos casos se trate de anorgasmia, es decir, la incapacidad para tener orgasmos, en muchos otros se debe al desconocimiento de la anatomía femenina.
Si seguimos tirando de estudios encontramos que sólo un tercio de las mujeres es capaz de llegar al orgasmo mediante la penetración. La mayoría de mujeres consiguen el clímax con la estimulación genital, casi un 80%, y coinciden en la importancia de los preliminares.
En busca del máximo control del propio cuerpo, ha salidoa la luz una ancestral técnica china que asegura poder mejorar la calidad y cantidad de los orgasmos a partir del fortalecimiento de los múculos del suelo pélvico: El Kung fu vaginal.
Gwineth Paltrow, una de las asiduas a esta técnica
Como no podía ser de otra manera siempre que salen técnicas excéntricas, las famosas se atribuyen el mérito de ser las principales embajadoras. Este es el caso de Gwineth Paltrow, que ha confesado llevar siete años practicándolo.
Resumiendo la práctica, se trata de una serie de ejercicios que puede realizar cualquier mujer y que ayuda a tonificar y ejercitar el suelo pélvico con ayuda de un pequeño peso.
En cuento al funcionamiento, lo que se debe hacer es atar una cuerda de nailon de unos 15/20 centímetros a una piedra de jade y en el otro extremo un pequeño peso. Después la piedra se introduce en la vagina y se abre las piernas, dejando el peso colgando.
La mujer debe contraer los músculos vaginales para aguantar el peso sin que se caiga la piedra. Una vez conseguido este paso, se debe tratar de mover las caderas creando un efecto péndulo que aumenta el nivel de esfuerzo y por tanto los beneficios.
Los beneficios del Kung fu vaginal
Este aprendizaje de las contracciones de la vagina supone un gran aumento de la calidad de los orgasmos (según han comentado quienes llevan tiempo practicando la técnica).
También supondría un apoyo a problemas como la incontinencia urinaria y podría servir tanto para preparar el parto como para ayudar a la posterior recuperación tras dar a luz.
Por último produciría un mayor apetito sexual en la mujer debido al aumento en la vascularización y la irrigación del sexo femenino y el aumento del placer masculino por el gusto que produce que se masajee y apriete el pene con los músculos de la vagina.
¡Ojo! No es oro todo lo que reluce, algunos expertos en sexología señalan la parte negativa de esta práctica y es que puede produccir infecciones si no se realiza correctamente.
Algunos recomiendan sustituir la piedra de jade por algún objeto elaborado con silicona médica, como pueden ser conos vaginales, bolas chinas o cualquier objeto del estilo que cumpla la función.
Sobre todo es importante mantener siempre el máximo nivel de higiene, tanto antes como durante y después del proceso.