Cuando una figura pública se vuelve famosa y consigue cierta relevancia social, es natural que se empiecen a crear mitos y leyendas urbanas alrededor de esa persona. Ha ocurrido a lo largo de toda la Historia: desde el túnel secreto que usaba Felipe IV para tener encuentros con una novicia hasta el concurso de imitadores de Charlotte Chaplin que perdió el propio Chaplin pasando por la supuesta criptorquídea (nacer con un único testículo) de Franco.
Y es que a la sociedad nos encanta crear historias (se supone que inventadas, allá cada uno con lo que cada uno quiera creer) y cuanto más alocadas, mejor. Hoy por hoy, y en pleno siglo XXI, las teorías sobre famosos crecen al mismo ritmo que la cantidad de nuevas celebridades que salen prácticamente cada día. Es hora de dejar atrás las historias de Jordi Hurtado y su inmortalidad y abrazar estas nuevas leyendas urbanas.
En este contexto aparece una teoría que sorprenderá a más de uno. Según el Cuerpo de la Guardia Revolucionaria Iraní, Kim Kardashian lleva años trabajando como un agente secreto y poco a poco está consiguiendo su objetivo gracias a Instagram. En declaraciones de Mostafa Alizadeh, portavoz del grupo, la estrella de Internet en la actualidad está corrompiendo el islam con su forma de vida. Este trabajo estaría enfocado, principalmente, a mujeres y jóvenes y atrayéndoles a un modo de vida ostentoso y con grandes aspiraciones.
"La señorita Kardashian es una modelo muy popular así que el CEO de Instagram le dice 'haz que parezca nativo'. No hay duda de que hay apoyo financiero detrás. Nos lo tomamos muy en serio". En Los Replicantes no podemos esperar a ver cómo se embute en su traje de agente del FBI en alguno de los descansos de su reality mientras le oculta su verdadero yo a Kanye West.
Illuminatis, muertos y accidentes de tráfico
Pero el caso de Kim Kardashian no es el único que asola las mejores leyendas urbanas del famoseo de este siglo. Beyoncé, sin ir más lejos, es una de las más "damnificadas" por este pasatiempo social. Desde que Queen B actuara en la SuperBowl de 2013, las teorías sobre su pertenencia a los Illuminati no han dejado de correr por Internet. ¿Por qué? Porque la diva decidió cerrar su show haciendo con sus manos la forma de un triángulo (icono de este grupo secreto) a pesar de que no era la primera vez que lo mostraba en directo.
Fue tal la repercusión que tuvo la teoría que hasta se llegó a decir que Blue Ivy, el nombre de su hija, correspondía al acrónimo de 'Born Living Under Evil, Illuminati Very Youngest', o sea, 'Nacida bajo el mal, la Illuminati más joven'. Además, se rumoreó que junto a su marido, Beyoncé estaría arropada dentro de la organización por estrellas como Lady Gaga, Taylor Swift o Kanye West, todos con el objetivo de inducir a la población a un nuevo orden social (encaminado a amar el pop y a crearse una cuenta en Tidal, suponemos). ¿Y qué opina Beyoncé de esto? Pues la cantante pasa. En 'Formation', single de su último álbum-sorpresa, dice textualmente "Y'all haters corny with that Illuminati mess". Vamos, que dejemos de decir chorradas, que damos vergüencita.
Sin duda, esta no es la leyenda urbana más loca de una estrella. La teoría más extravagante la protagoniza Avril Lavigne, estrella de rock para adolescentes en la pasada década. Según Internet, fuente muy fiable sobre estas noticias, la canadiense se suicidó en 2003 por el divorcio de sus padres por lo que la discográfica escogió una doble que dejó pistas en su siguiente disco. Los fans, que no saben cómo funciona la cirugía estética, aseguran que desde dicho año el estilo a la hora de componer cambió y su nariz se vio modificada. Lo más extraño es cuando aseguran que la altura de Lavigne se vio modificada 5 centímetros en un período de 10 años y que desde entonces canta con otro tono de voz. Por si esto fuera poco, algunos lunares de su brazo han desaparecido con el paso del tiempo y la propia Avril (la de ahora, no la muerta), es incapaz de responder sin balbucear cuando es preguntada por esta leyenda. ¿Será cierto o no?
Pero la mejor leyenda urbana de todas ocurrió en Europa a principios de los 2000. Alizée era una artista francesa conocida mundialmente por 'Moi... Lolita' y por sonar desde entonces en todas las clases de francés de todos los institutos del país. Al poco tiempo, nuestros vecinos decidieron propagar el rumor de que Alizée había perdido un brazo en un accidente y por eso no había vuelto a hacer ninguna aparición. Un joven preguntó en una revista si la historia era cierta y le respondieron que sí de una forma claramente irónica.
En España, esta cantante desapareció de la noche a la mañana por lo que este mito se propagó rápidamente de manera muy fácil lo que hizo que la gente se creyera tan absurda historia al 100%. Por suerte, la francesa no tuvo ningún accidente y siguió publicando discos. En 2013 publicó su quinto álbum de estudio y además participó en el '¡Mira quién baila!' galo, demostrando que sus brazos funcionan perfectamente.
