Si algo no puede faltar en el verano es una canción que nos haga bailar y pasárnoslo bien. Y eso precisamente es lo que nos ofrece Kiko Rivera con 'El conejo de la suerte', en la que tira de nostalgia recuperando la letra de una de las canciones más sonadas del patio del colegio pero envolviéndola con una base electrónica, un sonido actual "y ese silbido que se te queda", apunta el andaluz.
"He jugado al conejo de la suerte", recuerda Rivera, bromeando sobre el salto generacional: "Antes éramos más inocentes, ahora se saltan el conejo de la suerte. Todos los de mi quinta hemos jugado. ¿Pero a los jóvenes de ahora? ¿Juegan al conejo de la suerte? Creo que no, para ellos el conejo de la suerte será Bad Bunny".
"Esta canción me llega por parte de una artista como la copa de un pino, María Peláez, que se pone en contacto conmigo y me dice que tiene una canción que lleva mi nombre", explica, reconociendo que todos los meses recibe muchas canciones de compositores, pero que veces "es muy difícil que una canción que te mande alguien que no conoces te encaje a la perfección".
Eso le pasó con la ya mítica 'Quítate el top' con la que empezó en la música allá por 2011. "Alguien se puso en contacto conmigo para enseñarme ese single, pero yo no lo veía. Al final me arriesgué, porque mi equipo me dijo que tenía que arriesgar y era una apuesta segura. Y no se equivocaron. Yo no ese momento no tenía ni puta idea de nada", cuenta, apuntando que hoy en día le siguen pidiendo este tema.
Twitch, fama y trabajo
Más allá de la música, Kiko Rivera también está disfrutando de un dulce momento a través de plataformas como Twitch, donde ha conseguido hacerse un hueco. "Ahí te encuentras a un Kiko más cercano haciendo cosas que le gustan, como los videojuegos. Tengo mi programa en el que charlo con gente como Bertín Orborne, Toñi Moreno, WillyRex, Lolita. He tenido una primera temporada que ha sido maravillosa", cuenta y avanza su idea para una segunda temporada de 'En casa con Kiko': "Me gustaría que fuese presencial. Que tenga su propio plató, un equipo de realización detrás y que el invitado venga".
Es innegable que la fama con la que Kiko Rivera nació por ser hijo del torero Paquirri y de la tonadillera Isabel Pantoja le ha condicionado la vida, algo de lo que él hace balance: "Yo no he decidido ser famoso. Te abre algunas puertas y otras te las cierra. En la música me ha venido peor que mejor, tienes que demostrar más", se sincera, dejando claro que siempre intenta luchar y ponerse metas. "Me considero un afortunado", añade.
Así pues, el Dj sigue trabajando y ya adelanta que su próximo tema será una colaboración. También asegura que se está estudiando cómo volver a los escenarios durante el verano y advierte que ya están manejando fechas, aunque prefiere ser cauteloso debido a la pandemia. "El ocio es vida, todo el mundo está deseando irse de fiesta y yo tengo la suerte de que mi trabajo es hacer que la gente se lo pase bien", sentencia.