Más de un centenar de agentes de la Guardia Civil municipal de Madrid está siendo investigado por la Justicia. La apertura del expediente se debe a una serie de comentarios vertidos en un grupo de WhatsApp en los que descalificaban a Manuela Carmena y cargaban contra periodistas, políticos y La Sexta por sus noticias y reportajes.
"Que se muera la zorra vieja ya"; "vejestorio despreciable"; "lo que es terrible es que ella no estuviera en el despacho de Atocha cuando mataron a sus compañeros"; "hija de la grandísima puta roja de mierda mal parida", han sido varios de los mensajes que, según informa El Diario, han escrito varios agentes de la Policía municipal de Madrid en un grupo creado hace dos años por motivos laborales.
Tras la denuncia por parte de un agente que se encontraba dentro, el Juzgado de Instrucción número 49 de la ciudad madrileña se encuentra investigando el contenido de los mensajes vertidos por estos funcionarios públicos. El juez ha pedido identificar a los policías que escribieron estas amenazas contra Carmena, así como otros políticos como Pablo Iglesias (Podemos) o Gabriel Rufián (ERC) y periodistas de laSexta entre los que destacan Ana Pastor o Antonio García Ferreras.
Mensajes de odio y amenazas
La posición de Carmena en referencia a las cargas policiales realizadas durante la jornada del referéndum ilegal del 1 de octubre por parte de los cuerpos y fuerzas de seguridad del Estado no fue del agrado de varios agentes. La alcaldesa calificó entonces como un "terrible error" el uso de la fuerza desproporcional denunciado por los sectores independentistas y varias organizaciones de derechos humanos.
"Vejestorio despreciable" fue lo más suave que le llegaron a dedicar a la dirigente de Ahora Madrid. Llegaron incluso a desearle la muerte. El grupo de WhatsApp donde se produjeron los desafortunados y reprochables comentarios contaba con hasta 200 agentes. En los últimos días varios lo han abandonado, hasta quedar 115 policías municipales.
La idea inicial era utilizar esta herramienta para tratar las reivindicaciones laborales. Sin embargo, los atentados de Cataluña ocurridos el pasado de agosto así como el proceso independentista han calentado los ánimos de algunos miembros del cuerpo policial. En sus mensajes han cargado contra políticos de izquierda, periodistas, otros agentes policiales o incluso inmigrantes, fomentando el odio hacia estos colectivos.
Deseos de muerte para Carmena y de explosiones en La Sexta
El mensaje más contundente, duro e inhumano ha sido el lanzado por uno de los integrantes: "Lo que es terrible es que ella (Manuela) no estuviera en el despacho de Atocha cuando mataron a sus compañeros", dijo en referencia al terrible atentado cometido en un bufete de abogados de Atocha por parte de la extrema derecha en 1977 y de los que la actual regidora madrileña se salvó fruto de la causalidad. El agente con su texto deseó que la alcaldesa hubiera sido asesinada entonces.
Por otro lado, los mensajes contra el independentismo iban en aumento. Tal ha sido el odio reproducido por parte de estos policías que alguno llegó a desear que se produjera otro atentado como el de Las Ramblas (Barcelona).
Asimismo, el hecho de que Carmena cediera un espacio municipal para un acto 'contra el día de la Hispanidad' también fue duramente criticado. "Para eso si para poner la bandera no pedazo de vieja hija de la grandísima", alega un policía, a lo que otro añade: "hija de la grandísima puta roja de mierda mal parida".
Periodistas de laSexta como Ana Pastor ('El Objetivo') o Antonio García Ferreras ('Al Rojo Vivo') fueron objeto de críticas. Y no los únicos: también el líder de Podemos, Pablo Iglesias, o el portavoz de ERC en el Congreso Gabriel Rufián fueron objeto de comentarios desagradables. "Ojalá explote laSexta con todos ellos dentro y que ese día esté también Pablo Iglesias y Rufián", pide un agente.
Un compañero suyo le respondió solicitando que esa muerte sea "lenta y agónica". Pese a los avisos de algunos compañeros de rebajar el tono, la conversación continúa. 'El Diario' afirma que existen más comentarios de tan mal gusto que han decidido no publicar.
Un agente denuncia
Uno de los integrantes del grupo decidió presentar una denuncia en una comisaría tras recibir amenazas por su participación sindical en Comisiones Obreras.
El agente considera que los mensajes vertidos en dicho grupo constituyen un delito de odio y ha puesto en manos de la justicia las diligencias. Asimismo, asegura que ha tenido que incrementar la vigilancia policial tanto a su persona como a su familia tras las amenazas recibidas.
Fuentes municipales afirman a EFE que las declaraciones son "inadmisibles" pero que esperaran a que haya una resolución judicial para tomar las medidas pertinentes. Asimismo, desde el consistorio madrileño han querido elogiar la labor de este cuerpo policial municipal asegurando que no es el comportamiento general de los policías que trabajan a diario por combatir los delitos de odio y proteger a la ciudadanía.
