Carles Puigdemont, candidato de Junts per Catalunya, y Marta Rovira, secretaria general de ERC, han llegado a un acuerdo para iniciar la legislatura surgida tras las elecciones autonómicas del 21 de diciembre, que pasa por el apoyo de esquerra a la reinvestidura del expresident de la Generalitat sin que comparezca personalmente ante la Cámara.
En el encuentro llevado a cabo en la capital belga, Rovira y Puigdemont acordaron iniciar la legislatura y votar una Mesa del Parlament con mayoría independentista, con cuatro miembros repartidos a partes iguales entre JuntsxCAT y ERC, que se quedaría con la presidencia, por lo que Catalunya En Comú se quedaría fuera del órgano de gobierno parlamentario.
La reunión entre ambos líderes se celebró en Bruselas durante la noche del pasado martes 9 de enero, a las pocas hora de que el expresident de la Generalitat Artur Mas anunciara su dimisión como presidente del PDeCAT, partido de Puigdemont.
Incógnitas de la investidura
El acuerdo presenta algunas incógnitas, como la de los votos de los diputados electos que están en Bruselas, que podría resolverse mediante la delegación del voto en otros diputados. Tampoco se ha aclarado si los internos en prisión disfrutarán de permisos para ir a votar. Tanto Oriol Junqueras (ERC) como Jordi Sánchez y Joaquim Forn (JuntsxCat) tienen previsto pedir un permiso al juez para poder salir de la cárcel para acudir a la sesión de investidura del Parlament del 17 de enero.
De los 70 diputados electos independentistas, tres están en prisión y cinco en Bruselas, lo que podría dejar la mayoría en 62 diputados (seis por debajo de los 68 que marca la mayoría absoluta). Por el otro lado, Ciutadans, PSC y PP no disponen de mayoría alternativa porque suman 57 diputados, mientras que los Catalunya En Comú tiene ocho representantes.
Otra de las dudas vela sobre la manera en la que se llevaría a cabo la investidura, ya que si Puigdemont regresa a España sería detenido de inmediato. Así, el expresident plantea dos opciones: hacer el discurso de investidura por videoconferencia o bien que lo letera por delegación uno de los 135 diputados.
Queda descartado un posible bloqueo en la constitución del Parlament en caso de que no se pueda restituir al president, por lo que está asegurado que la legislatura se iniciará. De hecho, Puigdemont hizo presente este martes su credencial en el Parlament. El expresident huido a Bruselas, en una intervención por videoconferencia en Montpellier, al sur de Francia, dijo que quería volver a Cataluña con garantías y sin la amenaza de la Justicia española.Asimismo, en su cuenta de Twitter, dijo que volvería con toda la legitimidad como presidente elegido por el Parlament.
El meu compromís està intacte i treballaré per defensar la legitimitat de les nostres institucions. Tornaré amb tota la legitimitat a #Catalunya com a president escollit pel @parlament_cat ???? https://t.co/ZSLgP1U5se
— Carles Puigdemont ???? (@KRLS) January 9, 2018